10 razones para visitar Malta este invierno

Historia, cultura, paisajes, gastronomía, playas y un clima envidiable para disfrutar las vacaciones.

2018 será el año de Malta, ya que su preciosa capital, La Valeta, será Capital Europea de la Cultura, lo que será aprovechado para inaugurar el nuevo museo de arte MUZA, antiguo Museo Nacional de Bellas Artes. Primera razón para visitar un archipiélago compuesto por tres islas: Malta, Gozo y Comino, que forman un país con 7.000 años de historia plasmada en sus iglesias, monumentos y paisajes. Incluso en joyas de la arqueología como las catacumbas de San Pablo y Santa Agatha, utilizadas en la época romana como escondite de los primeros cristianos. Segunda razón.

La historia avanza, y Malta es hoy un país mayoritariamente católico en el que destacan sus múltiples iglesias y catedrales, y por el que pasó San Pablo (de quien incluso se conserva una reliquia en la Iglesia del Naufragio de San Pablo, en La Valeta). En Mosta, una de las ciudades más pobladas del país, podrás ver la tercera cúpula más grande de Europa, que sobrevivió en 1942 a la caída de una bomba de 200 kilos que no llegó a explotar. Corona la Iglesia de Mosta, en cuya sacristía puedes ver una réplica del proyectil. Tercera razón.

Los templos son muy importantes para Malta desde hace miles de años. Por eso podrás visitar los templos megalíticos de Ggantija, Hagar Qim y Mnjadra, ubicados en la isla de Gozo. Los primeros son anteriores a los de Stonehenge, además de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1980. Cuarta razón. Aunque Gozo merece una quinta razón para visitar Malta, ya que su ciudadela te permitirá viajar a la Edad Media: arcos, estrechas callejuelas, murallas… y un Museo de Arqueología utilizado como almacén de pólvora durante el siglo XVIII.

Seguimos en ciudades con encanto y llegamos hasta Mdina, conocida como la Ciudad del Silencio. Aquí podrás disfrutar de arquitectura barroca, con impresionantes palacios, iglesias y plazas complementadas con tiendas de artesanía local. Sexta razón. Pero hay más: Senglea, Vittoriosa y Cospicua, las «Tres Ciudades», serán inolvidables y te permitirán vivir la isla de una forma diferente. Es la séptima razón en un país en el que el pasado y el presente se entremezclan. Por eso, y como octava razón, te recomendamos el Hipogeo de Hal Saflieni, una necrópolis de tres niveles para cuya visita deberás reservar entrada con antelación, dadas las restricciones que existen para conservar esta joya anterior a griegos y romanos.

Si viajas con niños, además de las maravillosas playas del país y del envidiable clima, te recomendamos Popeye Village, el recuerdo del rodaje la película protagonizada por Robin Williams, allá por 1980: los decorados se mantuvieron y ahora son un parque temático con atracciones de todo tipo. Novena razón.

Para el final hemos dejado uno de los momentos que marcarán tu viaje: Marsaxlokk, el pueblo de pescadores por excelencia, donde cada domingo podrás visitar un mercado tradicional ya convertido en un símbolo del país (aunque compite con las coloridas barcas con un peculiar ojo pintado… que a su vez compite con la famosa Cruz de Malta como símbolo del país).

Malta es un país que no te dejará indiferente, y que incluye tantas joyas como rincones quieras recorrer. Un lugar en el que prácticamente en cada esquina encontrarás una iglesia, donde podrás visitar la impresionante Concatedral de San Juan o el Blue Lagoon, y donde, además, conocerás un pequeño país a tan solo 2 horas de casa. Irrechazable.