Arturo Pérez-Reverte vuelve a México con ‘Revolución’, «un relato más allá de ideologías»
El 3 de octubre asistimos en exclusiva a la presentación del último libro de Arturo Pérez-Reverte: Revolución, el relato de iniciación de un joven en plena Revolución mexicana.
“Esta es la historia de un hombre, tres mujeres, una revolución y un tesoro. La revolución fue la de México en tiempos de Emiliano Zapata y Francisco Villa. El tesoro fueron quince mil monedas de oro de a veinte pesos de las denominadas maximilianos, robadas en un banco de Ciudad Juárez el 8 de mayo de 1911. El hombre se llamaba Martín Garret Ortiz y era un joven ingeniero de minas español. Todo empezó para él ese mismo día, cuando desde su hotel oyó un primer disparo lejano. Salió a la calle para ver qué ocurría y a partir de ese momento su vida cambió para siempre…”. Bajo esta premisa comienza la última novela de Pérez-Reverte, que saldrá a la luz el próximo 4 de octubre con ecos de Joseph Conrad, tras el éxito de sus dos últimas obras: El italiano (2021) y Línea de fuego (2020).
Una memoria personal de Pérez-Reverte
Se trata de un relato que va “más allá de ideologías” según nos cuenta el autor en el desayuno que ofreció para la prensa reunida en The Westin Palace de Madrid. Una historia de iniciación y madurez de su protagonista, el joven Martín Garret, “a través del caos, la lucidez y la violencia: el asombroso descubrimiento de las reglas ocultas que determinan el amor, la lealtad, la muerte y la vida”, que un día le llevaron a él a también a primera línea de fuego.
Para construir el personaje, sin embargo, aparte del obvio bagaje, tomó como inspiración las vivencias de un amigo familiar: “Toda la vida escuché en mi casa la historia de aquel amigo de mi bisabuelo, ingeniero de minas, que trabajó en México en plena Revolución. Ese recuerdo remoto me ha aproximado a mi propia relación con la aventura y me ha llevado a escribir esta historia”, afirma.
“Mi novela no es ideológica deliberadamente, sino cómo se comporta el ser humano”
En cierto modo, anuncia, “es mi propia biografía de juventud, mi Flecha de oro”. Y la figura elegida para convertirla en este depositario no es otra que la de un personaje antagónico, un científico puro, alejado de las letras, que, sin embargo, como él, también se deja llevar por la atracción del conflicto, la seducción de las situaciones extremas que el propio autor ya dejó años atrás, pero que le han marcado a lo largo de toda su trayectoria, para entender la lógica del individuo: “Mi novela no es ideológica deliberadamente”, afirma, y continúa: “sino cómo se comporta el ser humano. La guerra es geometría, unas reglas con las que te puedes acercar a todo”.
De idealistas y bandoleros
Para terminar de construir la narrativa, Pérez-Reverte viajó por el país mexicano, fuente de inspiración, y se empapó del lenguaje propio del lugar, que tendrá que ser traducido a los más de 40 idiomas a los que se traducen sus obras para, como dice él, “no ponérselo fácil a los traductores”.
Así lograría, asimismo, inspiración para el resto de personajes de la obra, en la que el sexo femenino cobra un papel determinante y demuestra la valentía de las mujeres que también formaron parte los conflictos que sacudieron la república mexicana durante el primer tercio del siglo XX.
Por un lado, “Yunuen Laredo, una niña bonita de una familia acaudalada; la segunda, Diana Palmer, una periodista norteamericana inteligente, intrépida, resuelta y con agallas, y la tercera, Maclovia Ángeles, una de esas guerrilleras, valerosas, afectuosas y duras a la vez, que no se arredran ante nada y que acompañan en su marcha a los ejércitos de los líderes revolucionarios. Las tres desempeñan un papel crucial en la formación sentimental de Martín Garret y las tres le mostrarán realidades distintas del amor y los sentimientos”, sentencia.
Por último, Revolución es una crónica de la lucha que entablaron unos hombres por sus ideales y todas las caras del prima del fracaso que supone una guerra, un recorrido por las motivaciones que llevan a un pueblo a tomar las armas a pesar de la desigualdad de medios, con esa “dulce y violenta” dicotomía del carácter mexicano para, como admite uno de los personajes de la obra, “acabar con los patrones, con los que mandan… Con los que tuvieron la suerte de educarse en vez de ser puros desgraciados como nosotros”.
Arturo Pérez-Reverte (Cartagena, España, 1951) fue reportero de guerra durante 21 años y cubrió dieciocho conflictos armados para los diarios y la televisión. Con más de veinte millones de lectores en el mundo, traducido a 40 idiomas, muchas de sus obras han sido llevadas al cine y la televisión. Hoy comparte su vida entre la literatura, el mar y la navegación. Es miembro de la Real Academia Española y de la Asociación de Escritores de Marina de Francia.