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Looks antagónicos en la coronación de Carlos III del Reino Unido: ostentación vs. minimalismo

Marina Vazquez| 7 de mayo de 2023

El gran día ha llegado. El que fue etiquetado como el eterno príncipe de Gales deja atrás su distintivo para convertirse, oficialmente, en el monarca del Reino Unido: el rey Carlos III. Lo hace a los 74 años en un acto institucional que, tras un preludio tachado por algunos de interminable, llega ocho meses después del fallecimiento de Isabel II.

Como curiosidad, destacar que el primogénito y sucesor del trono de la Casa de Windsor celebra esta ceremonia siete meses antes de lo que lo hizo su madre; quien, por la marcada situación social y política de la época, tuvo que esperar más de un año.

No obstante, este es uno de los pequeños detalles que van a marcar y diferenciar ambas coronaciones. Lo más destacado es que, por ejemplo, Carlos III no contempla mantenerse alejado durante la ceremonia de su mujer, la actual reina consorte, Camila de Cornualles. Aunque, no todo es distinto.

 

Carlos III del Reino Unido será conducido hasta la abadía de Westminster en el Carruaje de Estado

El futuro rey del Reino Unido partirá hacia la abadía de Westminster en carroza. Lo hará junto a Camila, al igual que su madre lo hizo acompañada de su esposo Felipe, duque de Edimburgo, hace setenta años. Un recorrido, eso sí, que realizarán en el que fue el Carruaje de Estado del Jubileo de Diamante de Isabel II. La ceremonia a cargo del arzobispo de Canterbury será la coronación número 40 celebrada en la citada iglesia abacial.

 

Carlos III
Crédito:royal.uk

 

Se estima que al acto acudan cerca de 2.000 personas, una cifra bastante inferior a la de su predecesora, quien cuadruplicó la cifra. Eso sí, en este acto, no solo se ha tenido en cuenta a la realeza; los jefes de Estado están invitados. Un dato que evidencia el deseo del nuevo monarca: protagonizar una coronación más austera y breve que la anterior, inspirada en la de la reina Victoria.

Entre los invitados, no faltan los reyes Felipe VI y Letizia. Al igual que tampoco lo hacen: los reyes Guillermo y Máxima de Holanda, Mette Marit y Haakon de Noruega, Carlos Gustavo y la princesa Victoria de Suecia, Abdala II y Rania de Jordania o el príncipe Alberto II y Charlène de Mónaco, Mary y Federico de Dinamarca y los príncipes Fumihito y Kiko de Japón. Entre los cargos políticos, destaca la ausencia del presidente de Estados Unidos. Aunque, su mujer, Jill Biden, sí ha acudido.

 

Los preparativos que preceden a la coronación de Carlos III del Reino Unido, listos

Un día antes de la proclamación oficial del Monarca del Reino Unido, el palacio de Buckingham ha abierto sus puertas para recibir a los diferentes miembros de las casas reales. Una cita donde los tonos primaverales han dado color a las archiconocidas calles grises londinenses.

 

carlos iii coronación looks
@royaladdicted_new/instagram

 

Una convocatoria donde, como era de esperar, ha destacado de manera favorable el atuendo lucido por la reina Letizia. Para la recepción, optó por un vestido verde con fruncidos en la cadera de la firma de Victoria Beckham. Un rápido guiño a la moda británica, al que le ha dado su toque con el broche y los demás accesorios.

La princesa de Dinamarca, Mary, también enfatizó la predilección por los tonos pastel de la temporada y las mangas abullonadas. Para la ocasión, la futura consorte eligió un vestido en tonos fucsia de Singapur Andrew Gn. Una elección que combinó con un llamativo bolso recubierto de gemas azules.

Un tono -señalado en la pasada predilección del tono Viva Magenta– que también eligió la princesa Victoria de Suecia. En su caso, optó por un vestido de Roland Mouret cortado bajo el mismo patrón: largo midi, mangas cortas y un tallaje ligeramente ajustado.

Entre los más llamativos, no faltó el kimono, en los ya citados tonos primaverales de la temporada, de la reina Jetsun Pema de Bután.

 

Los looks antagónicos que se verán en la coronación comienzan

looks recepción de la coronación
@royaladdicted_new/instagram

 

En el lado opuesto, Rania de Jordania se inclinó por un diseño más formal trazado por la firma de Schiaparelli que, en contraste con los citados, pasó un tanto desapercibido.

Al igual que sucedió con la princesa Amalia de Holanda que, acompañada de la antigua reina Beatriz, sustituyó a sus padres. Para la ocasión, la futura heredera del trono se decantó por un elegante y formal traje negro de Marina Rinaldi.

Una elección neutra que secundó la princesa Isabel de Bélgica con un vestido de Armani. E, incluso, confirmó la duquesa de Luxemburgo, María Teresa.

 

El atuendo elegido por el proclamado rey Carlos III del Reino Unido

Si bien es cierto que está es la segunda investidura que protagoniza, el atuendo que lucirá Carlos III es totalmente opuesto al que llevó en su investidura como príncipe en 1969. Y, como cabría esperar, también difiere en la ostentación bien medida, a cargo de Norman Hartnell, por la que se decantó su madre, la reina Isabel II.

 

Carlos III coronación
Crédito: royal.uk

 

Ahora bien, abogando por su deseo de ser una ceremonia más austera, reutilizará las prendas históricas de la Colección Real. Unas que, por supuesto, lucieron sus predecesores en sus coronaciones, como su abuelo, el rey Jorge VI. Y que veremos llevar, junto al guante y la espada de coronación, al rey Carlos III cuando sea, oficialmente, coronado por el arzobispo.

De hecho, será investido luciendo la llamada Colobium Sindosis. Una túnica de lino y cuello liso con un solo botón, destinado a representar el alba sacerdotal. Una elección a la que, como dicta la tradición, sumará el abrigo dorado de manga larga. Una pieza que lucieron tanto su ya citado abuelo, Jorge VI, como su madre, Isabel II del Reino Unido.

 

Los looks antagónicos de la ceremonia

Ahora bien, para la gran cita: el rosa tampoco ha faltado. Persiguiendo la pasada moda cromática (buscando instaurarla una vez más), se podía ver un señalado intercambio de color predilecto en esta coronación. ¿Qué quiere decir esto? Muy fácil. Quienes optaron por decantarse por el rosa en la recepción, ahora, optaban por otro tono y viceversa.

 

@royaladdicted_new/instagram

 

Así, la reina Letizia dejaba a un lado su apuesta por el verde para decantarse por un traje de chaqueta y falda en el tono estrella de este acto. Un estilismo que acompañaba con una original pamela con detalles rosas y que, al mismo tiempo, ha querido potenciar luciendo algunas piezas emblemáticas -como los pendientes- heredadas de la Casa Real.

Lo mismo ocurría con Mette Marit, dejaba a un lado la chaqueta blanca de Alexander McQueen que lució en la recepción, para optar por un vestido en un suave rosa palo. Mientras que las reinas Máxima de Holanda y Matilde de Bélgica, quienes fueron representadas por sus hijas, han acudido con un atuendo blanco y rosa, respectivamente.

En el lado opuesto, encontramos que la princesa Victoria de Suecia optó por un vestido -que evocaba, en cuanto al patrón, a los que lucía Isabel II- azul oscuro. Mientras que la princesa de Dinamarca optaba por un vestido malva potenciado por una diadema.

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