Cómo deben afrontar las empresas la tercera ola de coronavirus
La primera ola de coronavirus llegó sin previo aviso, la segunda pilló a las empresas más preparadas, pero… ¿y si se produce una tercera ola? ¿Cómo deberían reaccionar las empresas? Desde IEBS dan algunos consejos para que una posible tercera oleada no pille desprevenidas a las empresas.
Lo primero que recomiendan es que se adapte el modelo de negocio a las nuevas necesidades que han surgido. Instan a los empresarios a ver oportunidades en las circunstancias de dificultad y que eso les sirva para evolucionar hacia el futuro. Consideran que el empresario debe conocer las necesidades de sus clientes y atenderlas. Así se podrá desarrollar bien el negocio.
El proceso de digitalización: la tarea pendiente que tendrán que afrontar las empresas ante una posible tercera ola de covid-19
El proceso de digitalización es otra de las tareas pendientes que tendrán que afrontar las empresas ante una posible tercera ola de covid-19. Algunos de los desafíos en este sentido pasan por disponer de buena conexión, implementar la automatización de procesos y robotización y prevenir ataques informáticos.
Mantener la ilusión y la confianza
Tampoco se debe olvidar, apuntan, cómo ha evolucionado el trabajo tras la pandemia. En este sentido, instan a implementar el teletrabajo y a renegociar las nuevas fórmulas laborales con sus trabajadores. Las empresas tienen que adaptarse a las nuevas circunstancias y permitir el trabajar a remoto es una de ellas para conseguir adaptarse a la nueva situación sanitaria.
La comunicación es también esencial en todo el proceso. IEBS incide en la importancia de comunicarse adecuadamente con los trabajadores y tener empatía con ellos. Y es que la situación provocada por la covid-19 ha fomentado la incertidumbre entre las plantillas. Es por ello por lo que hay que comunicarles en qué situación se encuentra la empresa, qué necesidades tiene y a qué retos se enfrenta.
Finalmente, se les conmina también a mantener la ilusión, pese a las circunstancias. Uno de los principales retos será mantener las ganas y confiar en que todo saldrá bien. Y es que los desafíos pueden generar nuevas oportunidades laborales.