De la quiebra a vestir a La Roja: así es El Ganso
Si hay una marca de moda que está en boca de todos, esa es El Ganso. Esta compañía madrileña es la encargada de vestir a los protagonistas absolutos de la Selección Española de Fútbol -con Luis Enrique, su seleccionador, a la cabeza- y a los periodistas de la cadena pública que se han desplazado hasta Qatar para cubrir el Mundial. Sin embargo, no todo ha sido un camino de rosas.
El Ganso nació en 2004 en Boadilla del Monte, a manos de Álvaro y Clemente Cebrián. El nombre hace honor a su abuelo. Desde niños, los dos hermanos eran muy inquietos, motivo por el cual su abuelo, cada vez que les veía, les repetía que “dejasen de hacer el ganso”.
Al crecer, estos hermanos tenían un sueño: revolucionar el mundo de la moda. Y, con muy buen ojo, supieron identificar perfectamente a qué nicho deberían dirigirse: al de la ropa masculina. Identificar a su público fue simple. Ambos, enamorados de la moda desde los 18 años, cada vez que salían a comprar ropa no encontraban nada que encajase ni en su estilo ni en su economía.
Con este plan en marcha, y cercanos a la treintena, decidieron tirarse a la piscina y crear El Ganso. Con sus ahorros y el apoyo de sus padres, en 2006 abrieron su primera tienda en Madrid. Aunque su idea era vender ropa a precios asequibles, lo cierto es que eso no lo han cumplido en su totalidad. El Ganso se sitúa entre las tiendas low cost y las de lujo, ofreciendo prendas de calidad a precios aceptables.
Esta idea, nacida de un sueño y materializada en la capital, poco a poco empezó a expandirse tanto por Europa como a nivel internacional.
Los años negros de El Ganso
Tal fue el éxito de El Ganso que, en 2015, despertó el interés del fondo L Catterton, propiedad de, entre otros, LVMH -o lo que es más conocido, Louis Vuitton-. Este grupo decide hacerse con el 49% del accionariado, el 51% restante seguía en manos de los Cebrián. El Ganso comienza a volar muy alto pero, en 2017, el vuelo se detiene.
Los problemas financieros empiezan a azotar a la empresa, que se ve asfixiada. Una ralentización del consumo y una mala gestión hizo que la empresa llegase a una situación límite.
Esa compra al fondo privado, que parecía una buena idea, supuso el principio del fin y, en 2017, L Catterton decidió vender su parte a pérdidas y salir del grupo. Los Cebrián volvieron a recuperar el 100% del accionariado por 50 millones de euros. Sin embargo, la situación económica era insostenible. Cerraron ese año con pérdidas de 22 millones.
Una tónica que se alargó en el tiempo hasta que, en 2019, con una situación realmente límite, los acreedores decidieron perdonarle parte de la deuda. Según informaba Cinco Días, la banca le perdonaría un euro de deuda por cada euro amortizado hasta que llegue a los 10 millones. Se calculaba que la firma tenía un pasivo bancario de cerca de 40 millones de euros, por lo que los acreedores le perdonarían hasta el 25%, siempre y cuando pagase el otro 25%.
La última refinanciación la lograron en 2021, cuando la banca acreedora de El Ganso llegó a un acuerdo con Bravo Capital para vender la deuda de la compañía, que rondaba los 30 millones. Los hermanos Cebrián tienen hasta 2026 para pagarla.
Un acuerdo que ha conseguido que la marca de ropa juvenil haya remontado el vuelo y haya conseguido dejar atrás sus problemas de liquidez. El pulmón financiero de El Ganso es fuerte desde 2020, cuando salieron de los números rojos.
RTVE y La Roja, su mejor publicidad
Sin embargo, el principal impulso de El Ganso ha sido, sin lugar a dudas, su unión con la Selección Española de Fútbol. En 2020 la Real Federación Española de Fútbol ya escogió a esta marca madrileña para vestir a sus jugadores para la Eurocopa de ese año.
Sin embargo, la verdadera explosión ha venido este 2022. La RFEF ha vuelto a confiar en El Ganso para volver a vestir a sus jugadores de cara al Mundial de Qatar. El Ganso ha representado ese estilo juvenil pero formal en el traje que visten los jugadores y equipo técnico fuera del campo.
Además, también han incluido accesorios como corbatas, zapatillas de deporte y abrigos acolchados de plumas, todos ellos de color azul marino con detalles en rojo y amarillo.
Además, El Ganso también ha vestido con anterioridad a la Selección Femenina de Fútbol y a la Selección Española de Fútbol Sala. La selección femenina fue todo un reto para la compañía, ya que su especialidad es la ropa masculina. Ese uniforme fue el debut de El Ganso con la Selección.
Pero no solo se encarga de los jugadores, sino también de los periodistas. En concreto, elabora los trajes de los profesionales de RTVE. Ya lo hizo para los Juegos Olímpicos celebrados en 2021 y, ahora, vuelve a repetir con todos los enviados a Qatar para cubrir el mes del mundial.
Esta es la mejor publicidad que puede tener El Ganso en estos momentos. La compañía vuelve a levantar el vuelo. Quizás por eso, haya rumores de que los hermanos Cebrián vuelvan a plantearse vender el 100% de la empresa por 50 millones. Puede que sea el salto definitivo de la compañía, o puede que vuelva a ser un fracaso. De lo que no hay duda es de que El Ganso, como el Ave Fénix, ha sabido renacer de sus cenizas.
