Los cargadores son el cordón umbilical de nuestros gadgets. Pero tienen sus limitaciones, siendo quizá la más obvia, que reducen nuestro radio de acción durante la carga a la longitud del cable. ¿Pero qué tal si tu móvil empezase a cargarse desde tu bolsillo nada más entrar en tu casa? Un artículo de la revista Nature asegura que no es ciencia ficción.

Un grupo de la Universidad de Stanford han logrado un método sencillo y seguro de cargador sin cables para que los móviles (y cualquier aparato con batería) se puedan cargar sin necesidad de estar anclados a nada. El método utiliza una serie de campos magnéticos, que hacen fluir la energía del emisor a un pequeño aparato recibidor en lo que quieras cargar. La gente de Stanford lo demostró con una luz LED.

En el vídeo se puede apreciar como la bombilla LED se enciende cuando se encuentra a una determinada distancia del emisor.

La tecnología de carga wireless existe en el mercado desde hace unos años. El problema es, que a pesar de no necesitar cable, requiere mucha proximidad entre la estación de carga y el dispositivo que quieras cargar. Funcionan como placas de inducción en la que es necesario que dejes tu teléfono sobre la placa para que pueda recibir la energía. No tiene cables, cierto, pero es poco práctico. Además, se necesita que el aparato a cargar esté «sintonizado» en la frecuencia en que la energía será «emitida».

La tecnología de campos magnéticos no requiere de esta sintonización. Basta con estar dentro del campo para recibir la energía. Ahora, lo que se necesita es que los circuitos de nuestros dispositivos se diseñen de manera eficiente para recolectar la energía de este cargador sin cables, de manera que no se pierda nada durante la transición.

Aunque aún falta que esta tecnología alcance su madurez, puede que estemos a las puertas de un futuro en el que no necesitemos cables y el concepto de carga quede obsoleto.