Hacoo: El fenómeno viral de las réplicas que seduce a la Generación Z

NOTA EDITORIAL: Desde Influencers, en ningún caso recomendamos la compra de productos falsificados, ni en Hacoo ni en ningún otro marketplace. Defendemos firmemente los derechos de autor y la protección de la propiedad intelectual como base del respeto a la creatividad, el diseño original y la innovación comercial.
¿Réplicas o robos? Qué es Hacoo y por qué arrasa en redes
¿Zapatillas Adidas Samba por 20 euros? ¿Unas Jordan 4 por 25? No es una errata: es la propuesta de Hacoo, una tienda online de origen asiático que ha conquistado a la Generación Z con productos que imitan a marcas de prestigio por precios irrisorios.
Hacoo funciona como marketplace, conectando compradores de todo el mundo con vendedores, mayoritariamente chinos, que ofrecen productos visualmente idénticos a los originales, pero sin licencia ni garantía oficial. Aunque técnicamente no se trata de artículos robados, sí hablamos de réplicas no autorizadas, lo que las sitúa en un terreno legal y ético cuestionable.
Su popularidad se ha disparado gracias a TikTok y Telegram, donde miles de usuarios comparten sus hauls (videos o publicaciones donde una persona muestra y comenta las réplicas -falsificaciones- que ha comprado, normalmente en grandes cantidades, explicando cuánto costaron, cómo llegaron, cómo de parecidas son a las originales, etc.) y enlaces de afiliación. Bajo etiquetas como #Hacoo
o #saramartdupe
, los vídeos superan los millones de visitas y los productos se agotan en cuestión de horas.
¿Moda accesible o cultura de la falsificación?
En España, adquirir réplicas para uso personal no es ilegal, pero sí lo es venderlas o promover su distribución. Es aquí donde entran en juego los influencers digitales, que al recomendar estos productos pueden estar incurriendo en una promoción encubierta de falsificaciones, algo que podría acarrearles sanciones o comprometer colaboraciones con marcas legales.
El dilema va más allá de lo jurídico. Promover la compra de imitaciones impacta negativamente en el valor del diseño original y en la economía creativa. Grandes marcas, así como diseñadores emergentes, ven cómo su trabajo se replica sin control ni reconocimiento, mientras plataformas como Hacoo se benefician del deseo colectivo de ‘pertenecer’ estéticamente a un estilo de vida sin pagar su verdadero coste.
Desde Influencers apelamos a la responsabilidad de los creadores de contenido. Ser influyente conlleva una ética. El fenómeno Hacoo puede parecer inofensivo, pero abre un debate urgente sobre el respeto a la propiedad intelectual, el consumo consciente y la sostenibilidad en el mundo digital que no se puede obviar.
Influencers se compromete a promover prácticas digitales responsables y a respaldar siempre la creatividad original frente a la copia.