Juan Roig vs. Gérard Mulliez: dos liderazgos diferentes que marcan a Mercadona y Auchan

España y Francia tienen más similitudes que diferencias, sobre todo en lo que a los supermercados se refiere. Mientras que aquí más del 25% de la cuota de mercado se la lleva Mercadona, en el país vecino es Auchan -con un porcentaje similar-. Detrás de este éxito hay dos figuras: Juan Roig y Gérard Mulliez.

Ser el dueño absoluto de la mayor cadena de supermercados de tu país implica que detrás de esa figura hay una gran fortuna, ya sea generada desde cero o heredada. Ese es el principal punto de unión entre Roig y Mulliez.

Mientras que el dueño de Mercadona amasa una fortuna de cerca de 4.000 millones de euros, situándolo como el tercer hombre más rico de España y ocupando la posición 728 del mundo, Gérard Mulliez tiene un patrimonio de más de 40.300 millones de euros y es la decimoquinta persona más rica del planeta.

Sin embargo, también hay otras cosas que les diferencian. Mientras que Juan Roig es un hombre hecho a sí mismo, Gérard Mulliez nacía en una casa más que acomodada.

El empresario valenciano nacía en 1949 en Pobla de Farnals, un pueblo de Valencia. Allí, sus padres eran dueños de Cárnicas Roig, donde el actual presidente de Mercadona comenzó a familiarizarse con el sector de la alimentación. Esta cadena nacería en 1977 de manos de sus padres, pero pronto el negocio pasó a las manos de Juan Roig. Gracias a su visión de negocio, Mercadona ha conseguido crecer hasta lo que es hoy día.

Por su parte, Gérard Mulliez nacía en 1931 en el seno de la familia textil Phildar, una de las más ricas. Mulliez se curtió estudiando en Estados Unidos, donde aprendió el desarrollo que estaban haciendo de los supermercados.

Las similitudes entre Juan Roig y Gérard Mulliez

Sin embargo, hay muchas otras cosas en las que se parecen ambos empresarios. Como en sus orígenes. Tanto Juan Roig como Gérard Mulliez decidieron abrir su primer local en su lugar de origen. En el caso del valenciano, la tienda ya existía, ya que era la tienda familiar. Por su parte, el francés, inauguró en 1961 en Roubaiz, su ciudad de origen, su primer almacén en el barrio de los Altos Campos.

Otra de las similitudes entre ambos es su obsesión para que tanto Mercadona como Auchan sigan siendo empresas plenamente familiares. Quizás ese es el principal motivo por el que ninguna de las dos empresas sean cotizadas. Es decir, ni Roig ni Mulliez han querido sacar a bolsa a sus empresas para no perder el control sobre ellas ni que personas fuera de la órbita familiar entren a tomar decisiones fundamentales.

Poco a poco, ambos han conseguido ir escalando en el sector de la distribución alimentaria. El éxito no ha sido de un día para otro y las ideas que han ido teniendo a lo largo de los años han catapultado a sus respectivas empresas a ser las más importantes de su país de origen. Sin embargo, crean recelos en el resto de países donde desembarcan.

El despegue de Mercadona en Portugal aún no se ha producido y los consumidores locales siguen prefiriendo los establecimientos de allí antes que los locales de Juan Roig. Algo parecido le ocurre a Auchan con Alcampo en España. Según los datos arrojados por Kantar, la insignia es la última del ranking, con solo un 3,3% de cuota de mercado.

Estas son las diferencias entre Juan Roig y Gérard Mulliez

Sin embargo, también hay cosas que separan a ambos empresarios. La manera de llevar el negocio en muchos campos es muy diferente a pesar de que el éxito alcanzado por ambos en sus respectivos países sea similar.

Una de las principales diferencias entre ambos es la capacidad de delegar. Mientras que Juan Roig, a sus 73 años, sigue al frente de Mercadona, Gérard Mulliez pasó el testigo del imperio familiar a su sobrino, Vianney Mulliez, en 2006. Desde entonces se dedica a labores de labranza, aunque sigue teniendo la última palabra en decisiones fundamentales para Auchan, como se reflejó en la famosa OPA a Carrefour.

De hecho, aunque cada año por los resultados anuales de la empresa sale a relucir la posible jubilación de Juan Roig, todo se queda en mera rumorología. Ni siquiera se sabe el nombre del sucesor o sucesora del gigante valenciano.

Otro de los puntos que les diferencia, y que hace que Roig esté siempre en el ojo de la crítica, es su relación con la prensa. Mientras que el español se niega a conceder entrevistas y solo ve a la prensa una vez al año con motivo de los resultados, Mulliez sí que es más flexible en ese ámbito y habla abiertamente con los medios sobre los problemas que sacuden a Auchan. Esto hace que su percepción pública sea un poco más amigable y menos hermética, como le ocurre al líder de Mercadona.

La última discrepancia entre ambas figuras de la distribución es su capacidad para diversificar el negocio. Aunque Juan Roig también está metido en temas de deporte y de startups a través de Lanzadera, lo cierto es que su principal foco es Mercadona. Sin embargo, la familia Mulliez tiene entre sus manos a grandes marcas como Decathlon, Leroy Merlin, Boulanger, Pimkie, Norauto, Quechua o Midas.

Dos personalidades distintas, dos países vecinos y dos formas diferentes de ver el negocio. Tanto Juan Roig como Gérard Mulliez han conseguido levantar por méritos propios dos grandes imperios como son Mercadona y Auchan. Sin embargo, las formas de hacerlo son muy diferentes.