Khloé Kardashian comparte qué prendas no pueden faltar en tu armario

Hace poco más de una semana, Khloé Kardashian lograba hipnotizar con su impecable y seductor estilo a sus casi 250 millones de seguidores, a través de una instantánea en su perfil de Instagram.

La socialité y empresaria acudía a las terceras nupcias de su hermana mayor, Kourtney Kardashian, y Travis Barker con un atrevido vestido de encaje de hombros caídos de Dolce & Gabbana que, posteriormente a los votos, adornó con un suave tul negro con corazones rojos que recordaba, por su diseño y combinación cromática, a la Reina de corazones de ‘Alicia en el país de las maravillas’.

Una prenda cuyo efecto enfatizó, además, combinándola con un cinturón que emulaba al patrón de un rosario y una llamativa corona dorada que seguía la misma estética.

Un cómputo global que los diversos expertos en moda catalogaron como el mejor look de la ceremonia. Sí, por encima de la novia.

Y pese a la popularidad que alcanzó el citado atuendo, este look no ha logrado enmudecer por unanimidad a las masas como sí han hecho otros de su interminable lista de estilismos compartidos. Algo que no es de extrañar si se tiene en cuenta que, a diferencia de sus otras hermanas, Khloé no se cansa de experimentar y probar nuevos diseños, colores y patrones de prendas y accesorios. Con mayor o menor acierto, pero siempre logrando hechizar al público que, ávido, busca cómo imitar el estilo de la pequeña de las Kardashian.

Incluso, Zara, el buque insignia de los Ortega, ideó una colaboración con ella. Y eso que, precisamente, la celebrity cuenta con su propia firma de ropa, Good American.

Khloé Kardashian: un estilo en constante evolución

A sus 37 años, el armario de la Kardashian sigue en proceso de transformación. Como ocurría con el vestidor de la reina Letizia. Si bien es cierto que todos los tipos de estampados (indistintamente de que sean animales o geométricos) siguen ocupando y llenando las baldas de su vestidor y que el patrón ajustado mantiene su hegemonía entre las perchas, desde su trabajada pérdida de peso hay nuevos patrones y prendas que han empezado a formar parte de sus elecciones de vestuario diarios.

De esta manera, pese a su afición por los vestidos de largo mini y escote pronunciado, los vestidos slip de largo midi, ahora, también tienen cabida en sus looks. Tan solo hay que recordar el inmaculado vestido largo de leopardo con transparencias de Dolce & Gabbana que lució durante la preboda citada.

Una prenda de estética vintage (debido a que pertenece a la colección de 1997 de la firma) que potencia el busto de Khloé, gracias a que está confeccionada a partir de un corsé. Asimismo, cuenta con una amplia abertura en el bajo que facilita el paso. Más allá de aportarle cierto toque sensual a los movimientos.

Para completar el atuendo, optó por unas sencillas sandalias de tiras finas que potenciaban su altura, estilizando la silueta.

Con cierto ‘glamour’ de la década dorada

En cierto sentido, más allá de su incansable sed de tendencias y su cambio de peso, las nuevas invitaciones a eventos de etiqueta han favorecido que el armario de Khloé transforme su característica dosis de sensualidad en elegancia. Y es que esas citas han favorecido que, en ese intercambio de perchas y prendas, se ideen looks que acaparen todos los aplausos. ¿Ejemplo? Su vestido largo, ajustado y dorado de la firma Moschino con el acudió, por primera vez, a la gala MET este año.

Una prenda elegante y sofisticada que se ajustaba al vestuario Gilded Glamour requerido en la invitación, pero que pese a ser slip estaba ideada para facilitar un movimiento seguro y práctico.

Una prenda que combinó con unos intachables guantes largos negros con volantes que enfatizaban el efecto de la época dorada de Hollywood.

Khloé Kardashian se declara fan de los básicos

Más allá de las citas señaladas, la empresaria suele decantarse por prendas con un estilo más informal, etiquetas más casual (como la amplia mayoría). Citas del día a día donde los socorridos básicos de armario, como los omnipresentes jeans, no pueden faltar.

De hecho, hasta aquellos denim más únicos logran, bajo el efecto Kardashian, imponerse como básicos. Así, esta prenda chic que cuenta con una decena de aberturas en el frente de las perneras luce completamente versátil, facilitando su renovación e inserción en diferentes atuendos.

¿Una combinación? La empresaria decidió lucirla combinada con un body que emula al cuero ceñido con tirantes. ¿El toque estrella? Unas prácticas sandalias que le aportaron ese punto elegante que lo hace adecuado para cualquier ocasión.

Transparencias, sí

Innovando en la gama cromática por la que suele optar, pero con su característico estampado, optó por este elegante vestido semi transparente que, combinado con ropa interior nude, no perdía su esencia sofisticada. Esto se debe a la tela elegida para su confección: gasa. Renueva el concepto de un clásico vestido con tela de jersey ajustado, gracias a que permite las transparencias de manera atrevida.

Asimismo, potenciando ese efecto, optó por lucir un semirecogido y pendientes de aros. Para complementarlo, por otro lado, se decantó por unas botas slouchy que, desde que las lució, se han impuesto como el último gran grito de moda de este entretiempo.

Efecto metalizado

@KhloéKardashian/instagram

Otra de las últimas tendencias que, desde la última temporada de primavera-verano, ha tenido cabida en su vestidor son los colores vibrantes. Si bien ya hemos mencionado que los dibujos destacaban en la mayoría de las perchas, los tonos neutros parecen haber sido prácticamente desterrados -a excepción del negro y el gris- de su vestidor.

Sin embargo, el efecto metalizado logra alzarse con la permanencia en su armario. Al menos, una estación más. Así, sin variar el largo mini, los tirantes finos y los escotes pronunciados se decantó por este alabado vestido que jugaba con el efecto lentejuelas.

Como dato distintivo, combinó la pieza con unos tacones de metacrilato que otorgaban un efecto limpio de las piernas, favoreciendo que la atención recayera en la pieza.

De esta manera, pese a la constante evolución y toma de estilos, Khloé Kardashian firma por prolongar de manera indefinida los patrones ajustados, los escotes y los colores llamativos (o efecto de lentejuelas) en el interior de su armario y, por supuesto, protagonizando todos sus looks.