Larga vida al aspecto juvenil
Hay una clave para que un tratamiento estético rejuvenecedor funcione, y el doctor Moisés Amselem la expresa en una norma clara: “Sí a restituir lo que se ha perdido; no a poner lo que nunca se tuvo”. La diferencia entre un “qué bien se mantiene” y un “algo se ha hecho” está en ese no poner de más y en la pericia con que el médico trabaja sobre cada rostro. Si Amselem se ha convertido en una de las personas más influyentes en la medicina estética en el ámbito internacional, no es solo por ese talento: en su haber está la creación de algunas de las técnicas que más se están utilizando en las clínicas de todo el mundo. Una de las más conocidas y demandadas es la llamada “palo de hockey”, que consiste en la infiltración de ácido hialurónico en los volúmenes perdidos del tercio medio del rostro, de modo que tense y haga menos visible el arco nasogeniano, es decir, esas arrugas que se marcan entre la nariz y la boca.
Clínica del Dr. Amselem en la calle Antonio Maura, 7, de Madrid.
Este verano presentó otras dos nuevas técnicas dedicadas a trabajar sobre la flacidez de dos de las zonas más complicadas del cuerpo: el abdomen y el cuello. Pastora Vega, que lleva años poniéndose en sus manos y aportando su imagen a sus dos clínicas de Madrid, le apoyó una vez más. En la revista Influencers hablamos con él. Nos interesa su trabajo, nos interesa su visión y nos importa entender por qué la medicina estética ha traspasado hace mucho el escenario y está, de forma invisible, en muchos de los rostros con los que nos cruzamos por la calle.
Le preguntamos al Dr. Amselem si el médico estético necesita tener una cierta visión artística del rostro, más allá del dominio de la técnica. «Los cánones de belleza son cambiantes con las épocas y las modas, pero, aun así, debemos mantener la armonía en el rostro basándonos en la proporcionalidad, y para ello hay que conocer cuáles son consideradas como proporciones adecuadas en cada estructura de cada tercio del rostro. Artista es el que crea arte, pero sí es cierto que, a la hora de hacer un rejuvenecimiento facial 3D, aplicamos nuestro sentido estético para conseguir armonía, y en cierto modo eso es una forma de esculpir el rostro. Así que, en ese sentido, no está mal llamarlo arte.
El Dr. Amselem nos cuenta qué trabajo realizó con Pastora Vega, imagen de la clínica desde hace años, para que esté así de radiante. Nos habla de lo que les preocupa a los hombres que acuden cada día a realizarse este tipo de tratamientos. Y qué material ha revolucionado la medicina estética.
Nos aconseja a qué tratamientos debemos someternos para acabar con la mirada cansada, manchas, descolgamiento y pérdida de volumen, arrugas de expresión…
>> Todas estas respuestas y la entrevista completa en el número de septiembre de la revista Influencers. ¡Ya en tu quiosco!
Texto: Coché Echarren
Fotos: Alfonso Esteban