El estudio ‘Loyalty Monitor 2017’ realizado por el Instituto DYM para Galanta tiene como objetivo determinar el grado de fidelidad de los españoles con las marcas de consumo. El último informe revela que solo el 12,2% de la población es totalmente fiel a su marca, frente al 86,5% que compra más de una dependiendo de las circunstancias. Entre estos últimos, cuatro de cada diez tampoco tienen una marca de referencia.

En cuanto a factores como el sexo y la edad, las mujeres son más fieles a las marcas que los hombres (un 15% frente a un 9%) y, entre ellas, las más fieles son las amas de casa. Por otra parte, la infidelidad a las marcas va decreciendo a medida que aumenta la edad. Así, los que tienen edades comprendidas entre los 56 y los 75 años son los más fieles a una marca concreta (34%), seguidos de los que tienen entre 36 a 55 años (23%). Los jóvenes de entre 16 y 35 años no llegan ni a un 18% de fidelidad.

Desde el punto de vista social, también se observan diferencias relativas a la fidelidad o infidelidad de los españoles respecto a las marcas. Por ejemplo, los hogares con ingresos económicos más altos son los más fieles (19%), mientras que este porcentaje desciende al 9% en los de clase baja. Otro condicionante a la hora de elegir (o no) una marca es el número de miembros de la familia: cuanto mayor es ese número menor es la fidelidad a una única marca.

Las personas que comprar una marca concreta alegan que lo hacen porque están satisfechos con ella (71,5%). Curiosamente, la relación calidad/precio queda relegada a la segunda posición, con el 46,9%. Otras razones son la costumbre (20,7%), que sea sostenible o ecológica (12,5%) o que sea local o nacional (12%), entre otras.

Las razones que motivan al consumidor a cambiar de marca son: tener un mejor precio (51,2%), haber encontrado ofertas atractivas (43,1%), por probar cosas nuevas (32,7%) o por recomendación de amigos/familiares (26,4%). La insatisfacción o el aburrimiento solo es señalado por el 11,2 y 6,2% respectivamente.