Estas son las profesiones que triunfarán con el Metaverso
Aunque a día de hoy nadie conoce muy bien qué aplicaciones tendrá, el Metaverso, según dicen los expertos está lleno de oportunidades. Incluso laborales. Por eso hay una serie de profesiones que triunfarán con el Metaverso.
El Metaverso, según los entendidos y según los creadores del término, es ese universo paralelo que promete que un avatar pueda llevar una vida plena. Desde acudir a conciertos hasta socializar con otros avatares pasando, por supuesto, por trabajar y ganar dinero. Se trataría de una suerte de mundo 2.0, en el que los ciudadanos de a pie se evaden del mundo real y viven la vida que siempre han deseado. Con todo lo que esto puede implicar, para bien y para mal. Este nuevo marco digital está llamado a ser la gran revolución del siglo XXI, si nada lo impide. Y, por eso, hay un conjunto de profesiones que triunfarán con el Metaverso. Y sabemos cuáles son.
Nadie parece tener muy claro qué es realmente el Metaverso. Ni cómo funciona. Ni siquiera si todos necesitaremos estar ahí. Pero los números hablan por sí solos. Según datos de Grayscale Investments, los ingresos potenciales del Metaverso ascienden a un billón de dólares. La mayoría de las grandes empresas ya se están posicionando: o bien compran parcelas y abren sus negocios en el Metaverso o bien desarrollan su propio ecosistema.
Y aunque se trata de un mundo digital, no se puede obviar el hecho de que sus ‘creadores’ serán seres humanos de carne y hueso. Seres humanos que requieren unas habilidades muy específicas que, a día de hoy, muy pocos poseen. Por eso, los más habilidosos, serán capaces de formarse en estas áreas y asegurarse un futuro brillante desarrollando y manteniendo el Metaverso. Y teniendo en cuenta que el Metaverso se acaba de presentar y que su apogeo se espera en un plazo de entre cinco y diez años, es una buena oportunidad para mirar al futuro con ganas de triunfar.
PROFESIONES QUE TRIUNFARÁN CON EL METAVERSO
Al ser un producto tecnológico de alta complejidad, los perfiles requeridos para estos puestos estarán relacionados, principalmente, con el campo de la informática. Así, los ingenieros de software especializados en realidad aumentada (AR) y realidad virtual (VR), estarán en una posición privilegiada. Y, aunque el Metaverso actualmente es tan solo un proyecto, solo en 2019 las vacantes para estos perfiles aumentaron un 1400%.
Y es que, si entendemos el Metaverso similar al ‘juego’ en el que se desarrollaba la película Ready Player One, el escenario nos recuerda irremediablemente a cualquier videojuego actual. Los diseñadores de juegos en 3D son los encargados de conceptualizar los personajes, desarrollar la historia y trabajar en la jugabilidad. Estos perfiles jugarán, nunca mejor dicho, un papel crucial desarrollando el Metaverso y todo lo que le rodea para que los usuarios puedan disfrutarlo libremente.
Una vez desarrollado el Metaverso y puesto en funcionamiento, habrá que desarrollar una historia en la que se desarrollen los acontecimientos. Pero no puede ser una historia lineal, como la de cualquier videojuego, sino que tiene que permitir la integración de diferentes géneros. Los conocidos como storytellers especializados en el Metaverso tendrán un futuro muy prometedor.
NO SOLO HAY ESPACIO PARA EL SOFTWARE
Aunque en el fondo el Metaverso es una plataforma digital, como cualquier producto, requerirá de diferentes dispositivos para poder acceder a él.
La ingeniería de hardware también se encontrará entre las profesiones que triunfarán con el Metaverso. Esto incluye a aquellos que se dediquen a la producción de discos duros, tarjetas gráficas y todo tipo de dispositivos para hacer funcionar el Metaverso en un ordenador. Pero también a desarrolladores de periféricos, como sensores, cámaras o auriculares. La idea fundamental del Metaverso es que los usuarios pasen allí tanto tiempo como sea posible. Por lo que la ergonomía, las baterías que permitan gran autonomía y los diseños atractivos tendrán un rol esencial.
Del mismo modo, la puesta en marcha del Metaverso y su uso masivo requiere de la firma de acuerdos con gobiernos y empresas para que inviertan en el proyecto, ya que un proyecto de tecnología punta implica unos costes desorbitados. En este punto entran en acción los desarrolladores de ecosistemas de Metaverso, especialistas en cultivar estas relaciones y llevarlas a buen puerto, a fin de que no sea una única corporación la que apueste todo a una carta.
Prácticamente al mismo nivel, se encontrarían los especialistas en marketing. Las campañas de marketing que se mueven entre el mundo real y el mundo digital aun parecen ciencia ficción. Pero, para 2028, cuando el Metaverso genere un mercado que ronde los 800.000 millones de dólares, aquellos que tengan la capacidad para atraer a millenials, integrantes de la generación Z y de las siguientes, será alguien muy codiciado.
LA CIBERSEGURIDAD TAMBIÉN TIENE UN PAPEL CLAVE
Los ciberataques y el fraude en Internet están a la orden del día. Las empresas dedican una buena parte de sus recursos a proteger sus servidores y la información de sus clientes. En un mundo conectado, es muy importante mantener unas redes seguras. Cualquiera puede, entonces, deducir fácilmente que la seguridad en el Metaverso es uno de los aspectos que más preocupan.
El avatar que campe por el Metaverso dispondrá de gran cantidad de datos de su usuario real, incluyendo algunos datos biométricos que pueden ser utilizados con fines ilícitos. Y como todas las transacciones económicas se realizarán mediante criptomonedas, el robo de estos activos puede suponer una merma considerable para el jugador.
Los expertos en ciberseguridad, que se afanen en detener ataques en tiempo real y mantengan actualizado el firewall contra los ciberdelincuentes, podrían llegar a ser esenciales en un futuro próximo.
El Metaverso se antoja complicado en todos los sentidos. Sin embargo, si la idea consigue triunfar e implantarse a una escala global, aquellos que posean tanto la infraestructura como los conocimientos para permitir que funcione como un reloj suizo, tendrán, por decirlo con pocas palabras, el mundo en sus manos.
