Nacho Sequeira (Fundación Exit): “España lidera la UE en paro juvenil y abandono educativo”

‘Enchufados al futuro’ ha sido el proyecto ganador en la II Edición del Premio a la mejor iniciativa social en el ámbito energético de la Fundación Naturgy. Se trata de una iniciativa de la Fundación Exit para que los jóvenes de familias vulnerables no abandonen los estudios y encuentren salidas laborales en el sector de la energía. Hablamos con su director general, Nacho Sequeira.

Fundación Exit lleva 21 años trabajando para que los jóvenes no abandonen sus estudios y reducir su tasa de paro. ¿Cuál ha sido la evolución en España de ambos ratios (abandono y paro) en estas dos décadas?

Nacho Sequeira: Ambos ratios han seguido evoluciones diferentes. Mientras que en el año 2000 nos enfrentábamos a un paro juvenil (menores de 25) de un 22%, ahora es cercano al 40%. Estas cifras no se pueden entender sin tener en cuenta las “grandes crisis”. La que empezó en el 2008 que nos llevó a cifras récord de paro juvenil superiores al 50%. Y, ahora que parecía remontarse la situación, la crisis de la covid que ha vuelto a disparar el paro juvenil. En cambio, respecto al abandono educativo temprano en el año 2000 estábamos por el 30% y actualmente está en un 16%. En este caso las crisis económicas han desincentivado el abandono prematuro de estudios. Los jóvenes ven que no hay empleo y permanecen más en las aulas.

De todos modos, lo que nos debería preocupar especialmente es que España está en puestos de liderazgo en la UE tanto en paro juvenil como en abandono educativo temprano, normalmente doblando la media de la UE. No deberíamos estar ahí. Estas cifras obligan a una reflexión profunda sobre las causas sistémicas de estos malos resultados que no estamos siendo capaces de revertir. Se habla de un mercado laboral polarizado con un grupo de adultos con puestos consolidados y un gran volumen de jóvenes marcados por la precariedad.

En cuanto al abandono escolar prematuro, es multicausal y muy difícil de resumir una posible solución. Pero parece claro el desajuste entre el nivel formativo de la población activa y las necesidades del mercado laboral. Hay que conseguir que más joven tenga formación intermedia para pasar del actual “reloj de arena al barril”. Es decir, menos trabajadores con poca cualificación, más con formaciones intermedias y menos con formaciones universitarias que no respondan a necesidades reales del mercado laboral.

Intuimos que el mercado laboral postcovid va a ser distinto y, en concreto, muy exigente. Se va a requerir un mayor nivel formativo, una mayor especialización y más soft skills. Hay que actuar ya para evitar que el abandono escolar y el paro juvenil empeoren aún más. Hay que poner en marcha soluciones reales y conjuntas y, por este motivo, proponemos proyectos como ‘Enchufados al futuro’.

«Esta crisis se ha cebado especialmente en los jóvenes en situación de vulnerabilidad»

Vuestro trabajo se centra en familias de entornos vulnerables. ¿Cómo les ha afectado la pandemia? ¿Ha aumentado las desigualdades en este sentido?

La pandemia y la crisis económica han golpeado en todas direcciones, pero sí que es cierto que, como en toda en toda crisis, los colectivos más vulnerables son los primeros y principales perjudicados y esta crisis se ha cebado especialmente con los jóvenes en situación de vulnerabilidad y sus familias.

Son los primeros que han perdido su empleo y se han quedado sin recursos económicos o muy limitados. Además, ahora muchos de ellos iban a ocupar trabajos vinculados al turismo, empleos que han sido en buena parte destruidos por la pandemia. Hay mucha desorientación ante la falta de oportunidades laborales.

Ante esta situación, nuestra labor es darles pistas acerca de dónde puede haber salidas. Por ejemplo, el sector energético (energías renovables, eficiencia energética y movilidad sostenible). Lo que pasa es que estas requieren una mayor formación. Y si a un joven cuya situación económica familiar es desfavorable le planteas que tiene que estar dos años formándose en un Grado Medio, te dirá que no puede porque le urge trabajar. Por eso hay que encontrar modelos de alternancia entre estudios y empleo como la FP Dual.

Enchufados al futuro

El proyecto ‘Enchufados al futuro’ busca integrar a estos jóvenes en el sector energético. ¿Es el que más potencial tiene a la hora de ofrecerles una salida laboral?

El sector energético es uno de los sectores que van a liderar la recuperación económica tras esta crisis. Está en constante transformación como consecuencia de la actual crisis climática y, además, va a ser uno de los grandes receptores de los fondos Next Generation de la Unión Europea. Sin embargo, desde hace años el sector tiene dificultades para atraer talento joven. Con este proyecto queremos acercarles puestos de trabajo que desconocen y donde tienen grandes oportunidades si apuestan por seguir formándose, como las energías renovables, la eficiencia energética y la movilidad sostenible.

Ello no quiere decir que sectores como el del turismo sigan siendo una buena salida laboral para estos jóvenes en cuanto se normalice la situación postcovid, pero seguramente necesitarán una mayor especialización, porque también es un sector que la pandemia habrá transformado. Otros sectores como el sociosanitario, el de la construcción o el logístico (sobre todo última milla) también van a ofrecer salidas laborales que no requieran de una formación superior.

«Es una iniciativa de impacto colectivo»

Implica a empresas del sector energético, centros educativos y administraciones públicas, ¿cierto?

En Fundación Exit tenemos claro que retos tan complejos como el abandono escolar prematuro y el desempleo juvenil requieren soluciones conjuntas. Por ello, alrededor de este proyecto hemos creado un ecosistema en el que los diferentes agentes relacionados con la formación y el acceso al mercado laboral de los jóvenes aportan su experiencia y trabajan juntos. Impulsores del ecosistema, centros educativos, las empresas del sector que aportan conocimiento y el tiempo y talento de sus voluntarios, administraciones públicas, financiadores e instituciones nos hemos unido y trabajamos juntos para alcanzar un objetivo común: crear oportunidades en el sector de la energía que cambien la realidad de los jóvenes vulnerables. Es una iniciativa de impacto colectivo.

¿Quién puede optar al proyecto?

Participan en el proyecto jóvenes estudiantes de FP Básica y FP Grado Medio en situación de vulnerabilidad, fundamentalmente de Madrid, pero también de Barcelona, Sevilla, Palma y Zaragoza. Son alumnos y alumnas de ciclos formativos de electricidad y electrónica, de entre 16 y 25 años. Es importante destacar que los alumnos no optan al proyecto de forma individual, sino que éste se implementa en centros educativos y trabajamos con el equipo docente para asegurar que es el momento adecuado para que sus alumnos participen el proyecto.

2022: año clave

¿Cuál suele ser vuestro grado de éxito? ¿Cuántos jóvenes encuentran trabajo de los que se acogen a vuestros programas?

El proyecto ha impactado ya en 278 jóvenes gracias a 262 voluntarios de empresas del sector energético que les han acompañado en sesiones de coaching y mentoría individual o han compartido su experiencia en actividades grupales en el aula. El proyecto tiene varias fases, de orientación, especialización e inserción, cada una de ellas con sus objetivos. En el caso de los alumnos más jóvenes el objetivo es que el 70% sigan estudiando tras conseguir el título de la ESO.

En el caso de los jóvenes que inician la FP de Grado Medio es que el 70% pasen a segundo curso, y en el caso de los participantes que están a punto de conseguir su título de FP el objetivo es que el 60% acceda a un empleo. Llevamos 2 años ejecutando el proyecto y el itinerario es de 3 años, por lo que el curso que viene será clave para evaluar la entrada de los jóvenes al mercado laboral (o continuidad de estudios a FP de Grado Superior).

«Muchas empresas alertan de la escasez de talento»

‘Enchufados al futuro’ ha sido el ganador en la II Edición del Premio a la mejor iniciativa social en el ámbito energético de la Fundación Naturgy, ¿qué ha supuesto para vosotros?

Supone un gran impulso al proyecto para llegar a más jóvenes el próximo curso 2021/22, que arrancamos en septiembre, y aumentar así su impacto. Además, este reconocimiento de Fundación Naturgy contribuirá a seguir avanzando en la réplica del proyecto en otros territorios. Por último, creemos que va a ser una palanca para dar a conocer el proyecto dentro del propio sector. A diferencia del sector turístico, en el que hay empresas muy potentes que llevan años invirtiendo en proyectos formativos para jóvenes en situación de vulnerabilidad, en el sector energético todavía no son habituales estas apuestas por parte de las empresas. Muchas alertan de la escasez de talento, de problemas de relevo generacional… ¡Ahora es el momento de invertir en estos jóvenes!