«La corrección política es la nueva censura y ya no puedes hacer ni decir nada»

Acaba de estrenar en Movistar+ la primera serie de televisión de pago rodada en blanco y negro, Arde Madrid. Una serie que consta de ocho capítulos que hacen un ejercicio de nostalgia recordando las fiestas de la actriz norteamericana, Ava Gardner, en Madrid, con su peculiar sentido del humor.

Pero Paco León llegó a nuestras vidas en 2003, primero, como lluvia fina (“¿Quién es ese chico pintado que habla como si tuviera un caramelo en la boca?”) en Homo Zapping. No sabías si te gustaba o todo lo contrario, pero no se le podía dejar de mirar. Luego, con el chaparrón de Aída, cuyos incontables capítulos aún colean en reposiciones de algún canal. Allí se batió el cuero y emergió un ciclón, el Luisma, que de tonto tenía lo justo, riéndose de todo y de sí mismo, llegando al límite y copando la atención de la serie –con permiso de Carmen Machi–. Cuando aún se ve de refilón en alguna pantalla como Luisma le entra “mucha ternura porque estoy superagradecido a ese personaje. Es el papel de mi vida… Soy un poco como Chanquete y eso es difícil de evitar, pero como hago tantísimas cosas, la gente ya ve más lo nuevo”.

Una cosa llevó a la otra y con lo que tenía ahorrado de Aída dirigió Carmina o revienta, que se estrenó al mismo tempo en Internet, cines y DVD. Hoy Paco León es un actor-director-guionista-productor en su mejor momento.

“Para mí llegar a dirigir fue un proceso natural, porque nunca paro”

Arde Madrid es su serie (suya y de Anna Rodríguez Costa, su mujer) porque la pareja es responsable del guion y la dirección de este proyecto largamente acariciado en común que finalmente ve la luz. La acción transcurre en el Madrid de 1961, con el bar de Chicote en todo su esplendor, Carmen Sevilla y Augusto Algueró en plan vip y tablaos como El Corral de la Morería luciendo el typical spanish del desarrollismo.

Hemos podido ver los primeros cuatro capítulos de Arde Madrid y, sin caer en el spoiler, dejo un aviso: atentos a Isabelita Perón (Fabiana García Lago) y a cierta gitana despechada (Miren Ibarguren) porque están inmensas.

Entrevistamos a Paco León a escasos días de este estreno.

Has tocado todas las facetas de la profesión: actor, director, promotor, guionista y hasta distribuidor… ¿No te gustaría actuar o dirigir, y ya?

Hay cosas más cansadas que otras, pero son necesarias y a mí no me cuesta el lado de la producción o de la promoción porque la tendencia de mi escuela dramática ya era de hacerlo todo, no de esperar a que te llamasen. Y ese sigue siendo el consejo que daría a quien empiece ahora: “Haz, súbete a un cajón en el metro o el Retiro, búscate la vida, pero no dejes de hacer. No esperes a que te llamen, porque, si haces mucho, cuando hagas algo bueno te van a llamar.

¿Cómo se dirige uno a sí mismo?

[Se ríe]. Woody Allen, que lo ha hecho tantas veces, ya dijo que la ventaja de actuar en tu propia película es que tienes un actor menos con el que discutir.

¿Qué clase de director eres?

Muy autodidacta. Hago lo que me sale y eso me ha dado mucha libertad porque también así encuentras tu propio lenguaje. Hay gente que quiere hacer una película como este o como aquel. En cambio yo, cuando ya sé lo que quiero contar, utilizo todo lo que tengo para hacerlo. Soy muy de los actores, porque soy actor y me pongo en su lugar. Me importa que las cosas sean de verdad. Si hay una fiesta, que sea una fiesta de verdad. El director no tiene que hacerlo todo, sino que es el único que tiene en la cabeza la historia que quiere contar, y yo me rodeo de un equipo técnico muy bueno. Y me gusta intervenir en muchas cosas, como en la banda sonora. Ahora, en Arde Madrid, estoy muy contento de esa mezcla que hay de canciones de la época, flamenco…

En esta entrevista, Paco León nos cuenta si todavía hay algo que aún le pueda resultar subversivo, nos descubre cuál es la película que le ha marcado y porqué, y nos revela su próximo objetivo profesional: ¿Tendrá Arde Madrid segunda parte…?

>> Todas estas respuestas y la entrevista completa en el número de noviembre de la revista Influencers.