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¿Necesitas un portátil para trabajar? Cómo realizar la elección adecuada

Helio Hervás| 27 de diciembre de 2021

Pese a que algunos habían vaticinado que el fin de los ordenadores portátiles estaba muy cerca, nada parece estar más lejos de la realidad. Actualmente, estos dispositivos son una herramienta perfecta para poder trabajar con una alta productividad en cualquier lugar. Si estás pensando en hacerte con uno nuevo, te indicamos algunos consejos que harán que elijas el portátil adecuado.

Lo cierto es que la fusión del mundo personal y profesional es toda una realidad. El teletrabajo ha supuesto un punto de inflexión en el día a día de muchos, y los fabricantes se han adaptado a las mil maravillas para ofrecer productos lo suficientemente flexibles para que se puedan utilizar, literalmente, para casi todo. Pero, pese a lo dicho, existen ciertos requisitos que es importante revisar el ordenador que se selecciona para estar seguro de que cumple con lo necesario para darle siempre el uso que necesitas (y, también, el que podrías necesitar).

 

 

Un claro ejemplo de lo que decimos es que, independientemente del modelo que decidas comprar, el peso es un factor clave. El que busca un portátil es que tiene intención de, al menos de vez en cuando, utilizar el equipo fuera de casa. Para que esto se logre con comodidad lo ideal es que el dispositivo elegido esté por debajo de los 2,5 kilos. Si es más, puede que en jornadas intensas de trabajo acabes un poco cansado. Eso sí, en ocasiones hay que sacrificar un poco este apartado por el precio, ya que cuanto más ligero es el portátil y más potente, se aumenta de forma exponencial lo que hay que pagar. Por lo tanto, hay que ser equilibrado, como en todas las cosas.

EL HARDWARE MÍNIMO DEL PORTÁTIL

De la potencia de los componentes que tenga el ordenador se podrá ser más o menos productivo… e, incluso, habrá software que puedas o no puedas utilizar (un claro ejemplo de esto son las herramientas de creación multimedia). Como resultado, es importante tener muy claro qué es lo que pretendes hacer con el portátil para tomar una decisión adecuada.

De todas maneras, si no quieres andar con complicaciones existe un mínimo para conseguir eso que todo el mundo dice: “que sirva para todo”. Actualmente, los modelos de Intel que tienes que elegir son los Core i5 y los Core i7 (siendo este último el más caro… y el recomendable para los más exigentes). Por cierto, un consejo: que la CPU pertenezca a la décima generación o posterior, ya que de esta forma el rendimiento es mucho mejor.

La exclusiva de Intel en el mercado de los procesadores se ha terminado, porque desde el lanzamiento de los nuevos modelos de AMD tiene una fuerte competencia en el mercado. En este caso lo que tienes que seleccionar es un Ryzen 5 o superior. De esta forma, tendrás músculo más que de sobra para realizar cualquier tipo de tarea con una gran solvencia.

 

Chip Integrado de Intel

 

Si eliges lo indicado como mínimo, estarás seguro de que podrás desde tener abiertas muchas aplicaciones a la vez hasta editar un vídeo que necesitas publicar o enviar a un cliente. Y, aquí, lo mejor es ir con los pies de plomo.

CUESTIÓN DE MEMORIA

Siendo muy importante la RAM, actualmente es complicado no encontrar un portátil que no incluya 8 GB, que es lo mínimo exigible para que el sistema operativo (Windows o macOS) funcione con fluidez. La recomendación que podemos hacer es la de duplicar esta cantidad -más es una inversión que difícilmente te dará un retorno adecuado-, ya que de esta forma podrás trabajar con archivos grandes sin tener que dejar el equipo inutilizado mientras se procesa una copia. Además, casi todos los ordenadores permiten efectuar ampliaciones, por lo que es algo que se puede corregir en el futuro.

Otro componente relacionado con la memoria es el disco de almacenamiento. Y, aquí, sí que es relevante elegir con cuidado, ya que de su buen funcionamiento depende tener una mejor o peor experiencia de uso… algo que no es tenido en cuenta por muchos. Actualmente, no hacerse con un equipo que tenga un disco interno SSD es un grave error. Estos tienen una altísima velocidad de transferencia de datos (triplican sin problemas a los tradicionales), y permiten incluso iniciar el sistema operativo en cuestión de segundos. La diferencia es como el día y la noche, por lo que aquí no te andes con remilgos. La inversión compensa.

 

RAM en un ordenador

 

Respecto a la capacidad, todo depende del uso que des al portátil. En muchas ocasiones 256 GB es más que suficiente, pero para no pillarte los dedos lo ideal es alcanzar el doble. Más, de nuevo, es un poco “tirar el dinero”, ya que existen opciones externas que también son una buena solución.

CLAVES EN EL PORTÁTIL: AUTONOMÍA Y PANTALLA

En el primero de los casos hay dos factores que se deben revisar: cantidad de celdas y opciones de carga. No es tan importante el amperaje, ya que este puede ser óptimo o no dependiendo del hardware del portátil y el uso que le das. Por lo tanto, este dato puedes comprobarlo, pero no es definitivo.

La cantidad de celdas sí que aseguran un buen comportamiento en todo lo que tiene que ver con la seguridad y vida útil. En consecuencia, te recomendamos que, al menos, sea de seis que incluye la batería del equipo. Y, en lo que tiene que ver con la carga, a día de hoy ya es habitual encontrar opciones similares a las que ofrecen los smartphones que admiten una potencia de trabajo algo por encima de los 30W, lo que reduce los tiempos en los procesos y todo ello sin riesgo alguno. Por lo tanto, sí o sí a la carga rápida en el caso que sea posible.

 

Chica utilizando un portátil

 

En lo que tiene que ver con la pantalla, hay dos detalles que son fundamentales y que se deben revisar. El primero tiene que ver con las dimensiones, lo ideal son modelos que tengan un panel IPS para asegurar una buena calidad que va desde las 14 a las 15 pulgadas. Menos es una inversión importante, y los equipos de catorce ya tienen unas dimensiones y peso bastante contenidos.

Luego está la resolución, que con ser Full HD es más que suficiente en la mayoría de los casos -se ve todo a las mil maravillas, todo hay que decirlo… incluyendo películas y series- y esto permite hacerte con un portátil de un precio contenido. Pero, si tienes grandes necesidades en el apartado del vídeo, lo ideal es dar el salto a los 2K o 4K. Eso sí, prepárate para realizar una inversión importante y, esto, además, impacta en la autonomía. Pero si hay necesidad… hay necesidad.

ALGUNA COSA MÁS

Para estar seguro de que haces una buena compra, hay cosas adicionales que son fundamentales revisar. Un ejemplo, que se incluya una buena cantidad de puertos USB para utilizar accesorios y, si es posible, que exista alguno tipo C. Esto permite el uso de hubs multifunción que, seguro, antes o después vas a necesitar. Además, que tenga acceso inalámbrico a Internet es clave, y si es WiFi 6 mejor que mejor para que la velocidad de trabajo sea excelente.

 

Logotipo de señal WiFi

 

En lo que tiene que ver con el sistema operativo, poco hay que decir más que selecciones con el que te sientas más cómodo. Pero, eso sí, es vital que el portátil que te compres use Windows, debe ser -y esto es indispensable- compatible con la versión 11 del desarrollo de Microsoft. Por seguridad y estabilidad en el trabajo, esto es vital.

Si sigues las recomendaciones que hemos dado, estarás seguro de que te haces con un ordenador “para todo” con el que podrás ser productivo, incluso, entretenerte en cualquier lugar. Y, esto, en realidad es de lo que se trata al elegir un portátil. ¿Verdad?

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