Portátiles con pantalla plegable, ¿son una buena idea?

Cuando hace unos pocos años se lanzó el primer teléfono con pantalla plegable, muchos pensaron que era un buen avance tecnológico… pero con una utilidad bastante cuestionable. Con el paso del tiempo se ha demostrado que esto no era así, y ahora son muchos los fabricantes que apuestan por esta clase de dispositivos. Pero hay algo que es sorprendente: que no existan ya otros tipos de dispositivos con estos paneles -como por ejemplo portátiles-, que apliquen esta tecnología.

Lo cierto es que, por un lado, es bastante lógico que esto pase debido a que las pantallas plegables son especialmente caras de producir (los paneles AMOLED utilizados con capas de polímeros para que conseguir la resistencia necesaria al doblarlos no son sencillos de fabricar… y eso hay que pagarlo). Y, esto, ha llevado a que muchas compañías no se decidieron a dar el paso. Pero esto, que ha sido así hasta ahora, está cambiando.

Por lo que se ha conocido, varios fabricantes han comenzado a probar opciones para lanzar al mercado dispositivos con paneles que se doblan, como por ejemplo tablets y portátiles. Lo cierto es que los primeros han suscitado poco interés -debido a que los teléfonos ya en el mercado tienen pantallas de grandes dimensiones una vez que se abren-.

Por lo tanto, quedan los portátiles que, por lo que parece, les ha llegado su momento. Y esto lo decimos debido a que hay compañías como HP que exploran su lanzamiento.

Qué ha llevado a que lleguen los portátiles

Por un lado, está claro que algunas compañías desarrollan este tipo de producto como una muestra de su capacidad tecnológica. Un buen ejemplo fueron los modelos que pusieron -no hace mucho tiempo- ASUS o Lenovo que incluían pantallas que se doblan. Ciertamente, los equipos de los que hablamos no son especialmente funcionales, pero esto siempre ocurre en las primeras versiones de cualquier cosa que es completamente nueva.

Una vez pasado este momento, generalmente se produce un pequeño parón -que es justo en el que estamos- y donde los diseñadores evalúan qué es lo que puede aportar una mejora de este tipo en los dispositivos que fabrican. Y, si la encuentran, se decide dar el paso de realizar proyectos que muestran a los usuarios que, en el ejemplo que nos ocupa, las pantallas plegables tienen beneficios en los portátiles. Y, lo cierto, es que es así.

Lo bueno de las pantallas plegables

¿Y cuáles pueden ser estos beneficios? Pues para empezar la reducción bastante drástica de las dimensiones que tienen los ordenadores con este tipo de paneles (teniendo en cuenta que se pueden doblar y que los teclados no son un problema). Por cierto, que estos últimos elementos tenderán más a ser retráctiles, pero completos y físicos… porque los integrados en la pantalla se ha demostrado que no son lo suficientemente eficientes.

Hay que decir que algunos de los inconvenientes que existen -y que se deben – son la potencia de trabajo y el control del calor. En el primero de los casos lo normal es que los fabricantes apuesten por componentes similares a los que existen en los smartphones (como por ejemplo un procesador con arquitectura ARM). Estos son más pequeños y no les falta una buena velocidad de trabajo. Además, ya existen versiones de los sistemas operativos que los utilizan sin problemas, como por ejemplo Windows.

En lo que tiene que ver con la disipación, lo normal es que se integren sistemas de refrigeración líquida también heredados de los dispositivos móviles para no tener que recurrir a los ventiladores que no encajan para nada con las pantallas plegables en los portátiles.

Existen más beneficios

Otro de los grandes beneficios que se logra con la llegada de los paneles de los que hablamos a los ordenadores tiene que ver con los factores de forma. Gracias a ellos, podrán ser mucho más avanzados e ingeniosos. Y, quizá, se consiga el esperado paso evolutivo que se espera en los portátiles para que dejen de ser completamente iguales todos.

De nuevo, esto mismo ha ocurrido con los smartphones. Por cierto, que las baterías no complicarán nada las cosas, ya que es posible encontrarlas con todo tipo de formas y celdas, por lo que no habrá grandes bajadas de rendimiento.

¿Cuándo serán habituales estos portátiles?

Pues lo lógico es que el año que viene comiencen a llegar los primeros modelos en las notas de prensa debido a que compañías, como antes hemos mencionado con el ejemplo de HP, ya han comenzado a realizar pedidos de los componentes necesarios. Y, esto, es un claro síntoma de tener los diseños ya avanzados y saber exactamente qué es lo que se necesita conseguir de los suministradores.

Bien es cierto que la cantidad de modelos será bastante limitada en un primer momento, debido tanto a que los precios de estos equipos no serán especialmente bajos. Y, también, a que no hay una cantidad de pantallas plegables muy numerosa en los mercados para todos los fabricantes de portátiles. Por este motivo, solo las compañías más punteras serán las que darán el paso en un primer momento… Y, eso, seguro que te suena de algo, ¿verdad?

Lo que seguro que todos los amantes de la tecnología tienen ganas es de comenzar a ver ordenadores con los que poder trabajar o estudiar que pueden doblar su pantalla. Y, esto, está mucho más cerca de lo que se puede pensar. Y, todo, gracias a los teléfonos móviles… quién lo iba a creer hace apenas un año.