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Quién es un asesor financiero y qué puede hacer por tu futuro

Maddalena Liccione| 5 de marzo de 2021

Existe la idea errónea de que solamente aquellas personas con un gran patrimonio necesitan un asesor financiero. ¡Y no hay nada más lejos de la realidad! Todos necesitamos tener a una persona especializada en temas financieros que nos enseñe y nos aconseje sobre cómo gestionar y dónde invertir mejor nuestro dinero y nuestros ahorros.

Pero, ¿qué hace exactamente un asesor financiero? Las situaciones de crisis e incertidumbre, como la que estamos viviendo, obligan a que la función primordial de un asesor financiero sea, más que nunca, la de ofrecer tranquilidad a sus clientes, además de buscar aquellos productos y servicios que solucionen sus necesidades de ahorro e inversión.

Desempeñar la labor de asesor financiero no es nada sencillo, ya que se trata de una profesión compleja y de gran responsabilidad, en la que hay que conjugar conocimientos profundos sobre economía y finanzas, analizar la actualidad desde un sesgo de escucha activa de amenazas y oportunidades para los clientes, y en la que, por supuesto, la parte emocional, humana y empática juega un rol fundamental. Un asesor es, por lo tanto, bastante más que una persona que ayuda a otros a invertir sus ahorros y a tomar decisiones de acuerdo con su situación patrimonial. En realidad, construye relaciones a largo plazo con sus clientes, basadas en la confianza mutua, para implementar estrategias financieras en horizontes temporales elevados, adecuadas a sus objetivos vitales, informándoles sobre los diferentes productos que existen en el mercado.

Por lo tanto, la figura del asesor financiero es, cada vez más, clave para aportar serenidad, conocimiento y certidumbre a los inversores minoristas, que deben tomar mayores posiciones de riesgos para intentar, al menos, batir el comportamiento de la inflación y, con ello, obtener una rentabilidad suficiente por sus ahorros pensando en el largo plazo.

 

En la era de la covid-19 nace el asesor digital

La covid nos llevará a un mundo diferente donde lo digital será parte de la vida cotidiana. En este atípico contexto se desarrollará la figura de un asesor cada vez más digital que utiliza la tecnología para interactuar con el cliente y desarrollar aún más su negocio. Se trata de un profesional de la vida real que pasa, de tener una relación física con el cliente, a tener una relación digital. Esto puede aportar valor de varias formas: en primer lugar, rompe distancias y hace más eficiente la forma de relacionarse, y además le da un valor añadido hacia sus competidores digitales (roboadvisors). El asesor digital debe utilizar herramientas digitales en su método de trabajo para identificar las necesidades del cliente, ampliar la gama de servicios ofrecidos y mejorar la customer experience. De hecho, los asesores financieros apuestan por la tecnología para mejorar el servicio a sus clientes.

Un asesor financiero te ofrece productos de inversión que no te pueden ofrecer desde las gestoras de las entidades bancarias

Según una reciente encuesta realizada por la plataforma de inversión e-Toro, la gran mayoría de los asesores financieros en España (91%) confirma que el avance de la digitalización y la tecnología está transformando radicalmente el mundo de la inversión y, de hecho, el 93% asegura que la tecnología ha sido clave para poder sobrevivir a la crisis sanitaria actual y continuar ofreciendo un servicio fluido a sus clientes. Para afrontar la crisis generada por la covid-19 y las continuas restricciones ocasionadas, los asesores financieros se han visto en la necesidad de adaptarse para continuar prestando sus servicios con la misma calidad de siempre a sus clientes. En este sentido, el 83% asegura que la pandemia está acelerando la digitalización de la industria financiera y el mismo porcentaje (83%) explica que ha incorporado nuevas herramientas tecnológicas para el teletrabajo que no había utilizado antes. Sin duda, la tecnología seguirá transformando la economía y la inversión, haciendo que los mercados sean cada vez más accesibles para el ciudadano de a pie, permitiéndole compartir información y conocimientos de forma fluida.

 

Las ventajas de contar con un asesor

Son muchas las ventajas de tener un asesor financiero. En primer lugar, te puede ofrecer mayor variedad inversora: un asesor financiero te ofrece productos de inversión que no te pueden ofrecer desde las gestoras de las entidades bancarias. Te ayuda a lograr tus metas financieras: conociendo a la perfección tu situación y objetivos. Un asesor financiero puede ayudarte a diseñar un plan y una estrategia que te permita alcanzarlos, considerando tu tipo impositivo, tu riesgo de inversión. “Contar con un experto que simplifique qué pasa en el planeta a nivel financiero nos ayudará a entender mejor el mundo que nos rodea. Existen diversas formas de hacerlo: ayudando a interpretar y analizar las noticias del sector, o explicando cuáles son las oportunidades que pueden generar los mercados. Por tanto, uno de los aspectos más relevantes del trabajo cotidiano de un asesor es precisamente estar junto a sus clientes a lo largo del ciclo financiero de su vida. Se trata de satisfacer cualquier expectativa o inquietud que puedan tener: una respuesta a una consulta sobre la deuda pública, una visión profesional sobre la situación de los mercados financieros o una propuesta de ahorro para la jubilación”, explican desde Banco Mediolanum.

Un asesor financiero te ofrece productos de inversión que no te pueden ofrecer desde las gestoras de las entidades bancarias

 

El asesor como psicólogo y consejero emocional

Marcados por un contexto de recesión, los asesores financieros tienen que ser capaces de transmitir un optimismo moderado, subrayando que pueden existir oportunidades interesantes para invertir en buenas compañías con negocios sólidos y que gozan de valoraciones atractivas, siempre, eso sí, que se tengan claros los riesgos, el perfil inversor de cada cliente y la orientación temporal que tendrá cada uno de sus productos dentro de su cartera. Algo así como privilegiar su rol como psicólogo y consejero emocional en vez de sus cualidades como especialista en los mercados, teniendo en cuenta que muchas personas lo que buscan, sobre todo, es certidumbre y tranquilidad. Un buen asesor sabe que las emociones influyen en la toma de decisiones financieras, por lo tanto, es un plus que nos ayude a gestionarlas.

 

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