Royal Mansour: un hotel-palacio en Marrakech
Marrakech es una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos, junto a Rabat, Fez y Mequinez. La llamada ‘ciudad roja’ resulta muy atractiva para los turistas gracias a sus numerosos mercados, jardines, mezquitas y palacios.
Si deseas que tu estancia en Marrakech sea inolvidable, una buena elección es un hotel de lujo que cumple con todos los estándares de oro: el Royal Mansour. El hotel fue encargado por el rey Mohamed VI y ha sido construido con proporciones palaciegas.
Este alojamiento ocupa casi cuatro hectáreas de exuberantes jardines moriscos en el extremo este de la Medina, entre el centro histórico y la Ville Nouvelle (ciudad nueva). El hotel ha sido concebido también como una réplica de una mini-Medina, con residencias privadas conocidas como riads.
En los 53 riads hay un patio central con una fuente, alrededor del cual se distribuyen las estancias. Los huéspedes pueden disfrutar de su propio bar, comedor y salón con chimenea, además de una terraza en la azotea con solárium y piscina privada. Las villas tienen entre uno y tres dormitorios.
Foto de Patrick Schierer en FlickrCada estancia está decorada con un estilo único y con todo tipo de lujos. Destacan las lámparas de cristales de Lalique, Baccarat y Venecia, los sofás de brocado de terciopelo o las alfombras de seda. Unos 1.200 artesanos están detrás de la creación de esta gran obra arquitectónica adornada con los mejores zelliges (mosaicos geométricos confeccionados con trozos de azulejos de colores), madera de cedro tallada, vidrieras, bronce batido o marquetería con incrustaciones.
Una de las particularidades de los riads es que están conectados por un laberinto de túneles subterráneos a los que solo puede acceder el personal del hotel. Las diez personas asignadas a cada riad podrán satisfacer así los caprichos de los huéspedes con la mayor discreción.
Foto de Patrick Schierer en FlickrEl hotel cuenta con cuatro restaurantes: Le Grande Table Marocaine y La Grande Table Française, están dirigidos por el chef con tres estrellas Michelin, Yannick Alleno, y ofrecen una gran variedad de platos locales e internacionales. El restaurante La Table ofrece un menú para brunch dominical y ejerce de salón de té, mientras que Le Jardin es un nuevo espacio al aire libre.
En sus tres bares se respira elegancia y buen gusto. Le Bar du Royal Mansour está decorado con Art Decó que evoca los felices años 20; Le Salon Cheminée se ha cubierto de girasoles plateados que se abren para apreciar unas magníficas vistas del jardín y el Bar a Cigares ofrece una amplia selección de puros de renombre.
Otro de sus servicios más preciados es ‘Le Spa’. Con 2.500 metros cuadrados, ofrece una amplia gama de tratamientos: masajes, hidroterapia, cuidado envolvente, etc. Desde 2016 pone a disposición de los huéspedes un tratamiento único en Marruecos combinando el embellecimiento de manos y pies.
El hotel ofrece la posibilidad de contratar excursiones. Una de las más interesantes es la que permite viajar a la cordillera del Atlas y cenar bajo las estrellas. También organizan visitas guiadas por la ciudad, con paseo en coche de caballos incluido, o montar en camello por las dunas de arena del desierto.