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Telefonía móvil 5G: lo mejor aún está por llegar

R3pyme| 14 de enero de 2020

Pese a que algunas empresas se han decidido ya a lanzar al mercado los primeros servicios de telefonía móvil 5G, lo cierto es que se trata de una tecnología que no ha experimentado todavía su pleno desarrollo, sobre todo en cuanto a infraestructuras y soportes se refiere.

De su estado actual, así como de las mejoras que acompañarán su completo progreso en los próximos meses, os ponemos al día en Influencers.

La revolución 5G

La llegada del 4G, la cuarta generación de las tecnologías de comunicación sin cables conductores, supuso una significativa mejora de las posibilidades de la anterior en lo relativo a velocidad.

Tras casi diez años desde su creación, haciéndose de rogar como todas las cosas buenas que nos exigen una dosis extra de paciencia, la red 5G promete ser mucho más rápida y con conectividad efectiva desde más lugares que los sistemas inalámbricos precedentes.Estas son sus principales mejoras teóricas:

  • Velocidad de conexión y descarga: Una velocidad de transmisión de 10 Gbps, multiplicando por varios dígitos las del 4G
  • Capacidad de respuesta: Latencia de 1ms, reduciendo unas 100 veces los retardos promedios en las redes de la generación anterior
  • Conectividad entre dispositivos:Hasta 100 dispositivos conectados por celda
  • Cobertura: Puede alcanzar el 100%
  • Consumo:Reducción del 90% de energía de la red

En resumen, 5G permite enviar datos a una mayor velocidad, a un mayor número de usuarios, con la capacidad y la flexibilidad necesarias para admitir sin problemas sensores inalámbricos, tecnologías de comunicación de vehículo a vehículo, semáforos inteligentes, redes de energía inteligentes, wearables, dispositivos domésticos inteligentes y otras tantas innovaciones que se anuncian.

Situación actual de la telefonía móvil 5G

Según el estándar aprobado por la organización no gubernamental 3GPP TSG para el despliegue de la tecnología y la telefonía móvil 5G, han de completarse distintas fases:

  • En la fase 1ª, se han desplegado durante 2018 y 2019 las capacidades 5G utilizando como soporte las redes 4G prexistentes. Este tipo de funcionamiento se denomina ‘Non Stand Alone’ (NSA).
  • Finalmente, de 2020 a 2021 y dentro de la fase 2, se desplegarán las primeras redes 5G con una infraestructura totalmente nueva ‘Stand Alone’ (SA)

Aunque la que estamos completando ahora con éxito, la primera, mejora las características de la generación anterior, dista mucho todavía de alcanzar los ofrecimientos teóricos esperados.

Existe, por otro lado, el problema de los dispositivos:

En la actualidad, solamente pueden disfrutar de esta tecnología aquellos usuarios de la oferta comercial que han adquirido terminales de última generación (por ejemplo, Samsung Galaxy S10, LG V50 ThinQ o Xiaomi Mi MIX 3), y en cuyo contrato se incluya la tarifa de datos ilimitada.

La escasa cobertura inicial, y la insuficiente penetración en interiores que se alcanza con la banda de 3,7 GHz ahora en activo, dificultarán previsiblemente una gran demanda de telefonía móvil 5G hasta finales de 2020, momento en el que se procederá a la subasta del espectro en la banda de 700 MHz que ayudará a aumentar de forma notable la cobertura.

Lo mejor aún está por llegar

Junto con la extraordinaria mejora en las prestaciones de la telefonía móvil 5G, la transformación revolucionará nuestra experiencia cotidiana con la tecnología:

  • Internet de las cosas: La mejora de velocidades y la disminución de la latencia incrementarán la capacidad para gestionar conexiones simultáneas, lo que permitirá, entre otras cosas, optimizar la eficiencia de los dispositivos inteligentes, al resultar posible que una gran cantidad de ellos conecten y se comuniquen con una única estación base.
  • Vehículos autónomos: La intercomunicación en tiempo real entre vehículos que circulan por la carretera, conductores y fabricantes favorecerán la implementación y la seguridad de este tipo de transporte.
  • Control remoto de dispositivos: Hará efectivas y fiables todo tipo de aplicaciones a distancia que sirven de base a servicios de telemedicina, sistemas de seguridad y otros como la fabricación inteligente.

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