Tipos de empresas que se pueden constituir en España
Crear una empresa en España no tiene por qué ser siempre un proceso arduo, especialmente, tras la aprobación de la ley de startups. Sin embargo, hay varios tipos de empresas y, dependiendo del que vaya a crear, el proceso puede resultar algo burocrático y largo.
Los ciudadanos de la UE que se constituyan como empresarios individuales o sociedades pueden pasar por el aro con relativa rapidez. Otra cosa son los expatriados de fuera de la UE, que necesitarán un permiso de trabajo para trasladarse a España y crear una empresa.
Con una amplia gama de estructuras empresariales disponibles, la creación de una sociedad limitada puede ser lenta y costosa. Esto se debe en gran parte a que el gobierno español impone unos requisitos financieros mínimos a quienes desean constituir una sociedad en España.
Las normas y consideraciones en torno a la creación de una empresa en España varían en función del alcance de sus planes.
Estos son los tipos de empresas actualmente:
Trabajadores por cuenta propia en España
Los trabajadores por cuenta propia en España se conocen comúnmente como autónomos, y deben registrar su empresa en la Agencia Tributaria y la Seguridad Social españolas, pues también son tipos de empresas en nuestro país.
La mayoría de los autónomos tienen que presentar declaraciones trimestrales del IVA, así como una declaración anual del impuesto sobre la renta (I.R.P.F.). Con frecuencia son aplicables otras declaraciones trimestrales y anuales, dependiendo de tus circunstancias.
Sociedades unipersonales y sociedades colectivas en España
La forma más barata de crear una empresa en España es constituyendo una sociedad sin personalidad jurídica. Puede hacerlo como empresa individual o como sociedad civil. Con estas fórmulas, no hay requisitos mínimos de inversión y no tendrá que pasar por muchos de los trámites necesarios para constituir una sociedad limitada.
Como empresario, serás responsable de tu propia declaración de la renta. No hay distinción legal entre sus activos empresariales y sus activos personales. Por tanto, si su empresa se endeuda, usted será personalmente responsable.
Las sociedades unipersonales y las sociedades colectivas son más adecuadas para pequeñas empresas que no tienen un gran volumen de negocio anual ni emplean a muchos trabajadores. Si va a crear una empresa en España solo, también puede optar por establecerse como profesional autónomo.
Si son varias personas las que van a constituir una sociedad y desean limitar la responsabilidad personal y dotar a la empresa de una estructura más formal, pueden constituirse como sociedad comanditaria en lugar de sociedad colectiva.
Sociedades limitadas en España
En España existen varios tipos de sociedades limitadas. La forma más común, sin embargo, es la sociedad limitada o S.L. La constitución es importante para proteger al propietario de la responsabilidad personal en caso de quiebra, pero este tipo de estructura conlleva una serie de obligaciones fiscales, contables y mercantiles adicionales.
Una SL tiene que presentar una declaración anual del impuesto de sociedades español y las cuentas reglamentarias. El propietario tendrá que presentar sus declaraciones de IVA, y suelen ser aplicables varias otras declaraciones periódicas.
Crear una empresa sin ánimo de lucro
Las empresas sin ánimo de lucro en España se dividen en dos categorías: fundaciones y asociaciones. Las organizaciones benéficas tradicionales que aceptan donaciones del público suelen pertenecer a la categoría de fundaciones. Las asociaciones, por su parte, suelen estar dirigidas de manera más informal por grupos de personas que tienen un interés común.
Crear una asociación es gratis. Con una fundación, cualquiera puede donar a la causa (no hace falta ser socio) y los miembros del comité pueden cobrar por su trabajo, como en una empresa normal. Las fundaciones que facturan más de 2,4 millones de euros o tienen más de 50 empleados deben someterse anualmente a una auditoría externa.