El turismo náutico se consolida en España
España es uno de los destinos favoritos para los turistas. La llegada de la pandemia ha modificado los hábitos del visitante, que ve en el turismo náutico la mejor forma de disfrutar de unas vacaciones seguras.
Las restricciones impuestas por la pandemia hicieron tambalearse a todo el tejido industrial que gira en torno al turismo. La principal industria de España sufrió un fuerte varapalo que, gracias al turismo náutico, ha conseguido estabilizar.
En 2021 el turismo náutico se ha consolidado como una de las formas favoritas por los turistas nacionales e internacionales para pasar sus vacaciones. A bordo de un barco no hay que estar tan pendientes de mantener la distancia de seguridad con no convivientes y uno se puede olvidar, momentáneamente, de la mascarilla.
Islas Baleares es el destino más demandado
El paraíso natural, la oferta gastronómica o las bellas calas, son solo algunos de los motivos que convierten al archipiélago balear en el favorito para los turistas nacionales e internacionales.
Las posibilidades de arrendar diferentes barcos por particulares y disfrutar del turismo náutico han aumentado exponencialmente desde 2019, antes de la pandemia. En este sector, el turista nacional sigue siendo el mayor cliente, suponiendo cerca de un 60% de las reservas totales. A nivel europeo, Francia aporta el 14% de los turistas mientras que los alemanes representan el 10%.
Menorca, Ibiza y Mallorca, en ese orden, son las islas favoritas, aunque no hay que olvidar otras localidades con una fuerte tradición náutica como Marbella o Barcelona.
¿Cómo es el turista que se decanta por el turismo náutico?
Durante el verano de 2021, el turista que ha elegido la costa española para disfrutar del turismo náutico es, principalmente, español. Se trata de un varón de entre 45 y 55 años, residente en grandes ciudades como Madrid o Valencia y que viaja en agosto, aunque no tiene problema en prolongar sus vacaciones hasta septiembre.
Respecto a las embarcaciones favoritas, en primer lugar se encuentran las lanchas, seguidas de barcas neumáticas, veleros y catamaranes. Las lanchas y las barcas neumáticas son alquiladas para pasar el día. Por su parte, veleros y catamaranes se convierten en el hogar del turista durante al menos siete días.
Cómo se ha recuperado el sector del turismo náutico
Las previsiones apuntan a que, en comparación con 2020, las reservas de embarcaciones supondrán un aumento del 150%. España compite en este sector con Croacia, otra de las joyas del Mediterráneo donde se ha puesto de moda navegar por la costa recorriendo las diferentes islas del país.
A nivel internacional, la demanda cayó desde el 53% en 2019 al 30% en 2020. En 2021 ha experimentado un repunte de hasta el 65%.
El turismo náutico es más seguro que el tradicional
El turista medio considera más seguro navegar y alojarse en un barco que en un hotel. La embarcación es un entorno controlado que se ve como una extensión de su hogar. Qué mejor forma de relajarse y de disfrutar de los días de descanso que no tener que preocuparse de si se tiene algún contacto estrecho con un positivo por covid-19.
Por eso este turismo, antiguamente reservado a un turista con un poder adquisitivo alto, se ha democratizado para todos los bolsillos. Alquilar un barco para surcar las aguas del Mediterráneo no sale más caro que pasar una semana en Ibiza.
Pero, independientemente de la seguridad y la disminución de riesgos sanitarios, este turismo se ha puesto de moda por la experiencia que supone. Avistamientos de delfines, el acceso a calas a las que solo se puede llegar por mar y la posibilidad de disfrutar de deportes como paddle surf en aguas tranquilas. Todo ello supone un aliciente para decantarse por el turismo náutico en lugar del turismo tradicional.