Banco Santander: ¿está preparando el mayor ERE de su historia?
Escuchar a Ana Botín, presidenta del Banco Santander, difiere poco o nada de oír a los grandes magnates tecnológicos. En sus intervenciones, la ejecutiva evoca conceptos como ‘plataforma global’, ‘efecto red’ o ‘escala’ como parte de lo que considera una estrategia única (One Santander, lo llama). Pero en esas palabras no solo hay marketing, también hay una parte de realidad. Y otra de miedo. De hecho, reconoce que su “mayor competidor es Apple”. Por ello, Botín se ha lanzado a transformar el banco de arriba a abajo, lo que incluye, primero, la tecnología y después ,irremediablemente, a la plantilla.
Para ver como Banco Santander está cerrando esa diferencia, lo que llevará a una oleada de despidos nunca antes vistos, primero hay que centrarse en el aspecto tecnológico. La razón es que primero se debe crear lo que Botín llama “plataforma global”; esto es, un sistema que dé soporte a todos los negocios en todas las áreas del mundo. Eso le permitiría de entrada tener un organigrama similar al de Facebook o Apple (al menos, en su parte de servicios) y aprovechar mejor tanto su escala como los denominados efectos red.
Aunque conseguir eso no es nada fácil, la entidad está manos a la obra. De hecho, el pilar de esa plataforma ya está en cierta medida operativo: el backend Gravity da soporte a todo Openbank. El siguiente paso será eliminar aquellos puestos que ya no son necesarios, puesto que mucho trabajo ya se ha automatizado. Para entender la escala de los despidos y las salidas que se avecinan, hay que tener en cuenta que Banco Santander tiene más de 212.000 trabajadores actualmente, mientras que firmas puramente tecnológicas como Facebook tiene 80.000 y Revolut (que tiene más usuarios que Santander) apenas 5.000.
BANCO SANTANDER: UN “BANCO DIGITAL CON SUCURSALES”
En el mejor de los casos, lo anterior significaría acabar con más de uno de cada tres empleos en Banco Santander. Y aunque parece a día de hoy una utopía, también lo parecía en su momento hablar de que la digitalización iba a borrar casi todas las sucursales bancarias. Pues ahí va el dato: desde el año 2008 han desaparecido en España unas 28.000 oficinas bancarias, lo que supone hasta un 60% del máximo que se alcanzó en ese mismo año. En cuanto a empleos, el sector ha eliminado más de 115.000 puestos de trabajo desde entonces, por lo que convendría tomarse esas referencias más en serio y pensar menos en que puede ser una utopía.
Pero es que además hay datos todavía más demoledores. Uno de ellos es que Facebook, por ejemplo, necesita menos de 300 personas en España para manejar su negocio. Apple, por su parte, tiene en nómina algo menos de 1.500 empleados en territorio español. Mientras, Banco Santander mantiene actualmente cerca de 30.000 trabajadores en España, de los cuales, solo unos 2.000 funcionan para dar soporte al resto del grupo, a través del centro corporativo. Una pista de lo que viene, la daba hace no mucho el consejero delegado, Hector Grisi, al afirmar que el banco ya ha automatizado el trabajo de la mitad de sus empleados en las sucursales españolas.
Al final, la idea de reducir notablemente el número de trabajadores en España y en el resto del mundo no es sólo inevitable, sino que es un deseo tanto de Botín como del equipo directivo. De hecho, ante los analistas, la presidenta subrayó que quieren convertirse “en un banco digital con sucursales”. Ese es el modelo, por ejemplo, que tiene Bankinter, y que con un plantilla de poco más de 6.000 personas se ha convertido en los últimos años en el banco más rentable de España.
EL PRIMER GOLPE SERÁ EN ESTADOS UNIDOS
Lo anterior no es un análisis prospectivo o a largo plazo, sino que ya ha empezado a implementarse y lo hará todavía más rápido a lo largo de este año. En primer lugar, porque el despliegue tecnológico ya está en marcha y avanza a un buen ritmo. De hecho, Gravity funciona perfectamente dando soporte a toda la unidad de consumo digital de la entidad. Además, pronto se va a utilizar este sistema para integrar a todos los clientes que tiene el banco en Estados Unidos, según ha prometido Botín, lo que le permitirá llegar a un número mayor de usuarios.
Banco Santander está ganando el suficiente dinero para acometer un recorte de entre 30.000 y 50.000 personas y asumir todas las indemnizaciones pertinentes
Aunque también le permitirá ajustar los costes, y entre ellos, seguramente, el número de trabajadores. Al fin y al cabo, según la propia Botín la implementación se traducirá en “una mejor eficiencia y por tanto mayor rentabilidad, de forma sostenible”. De hecho, ya ha empezado a hacerlos, en concreto, el número de trabajadores se redujo en el último año en Estados Unidos en unos 1.000, un 7,7% de la plantilla, el único recorte importante en personal en todas las geografías del grupo. No obstante, eso es solo el principio de lo que está por venir y es que la intención del Santander es extenderlo por toda la división de Norteamérica, lo que incluye México.
Y más adelante será el momento de España y, por extensión, Europa, donde hay una plantilla de 67.000 empleados en los que meter la tijera. La última pieza del puzzle en todo esto, además, ya está colocada, ya que la entidad tiene el capital necesario para llevar a cabo las indemnizaciones pertinentes para acometer tal ajuste en la plantilla. Así, los años récord de beneficios le están permitiendo al banco ‘guardar’ más de 5.000 millones al año, lo que en un par de años será suficiente, si quisiera, para asumir un ERE de entre 30.000 y 50.000 personas al mismo coste que el último realizado en España. Aunque los recortes ni serán tan elevados de golpe (se espaciarán en el tiempo), ni tan caros como en España; de hecho, en regiones como EE.UU. sería muchísimo menor.
En definitiva, Banco Santander no solo se encuentra en un momento en el que reducir plantilla se ve como algo necesario para defender márgenes -en efecto, el sector ha eliminado más de 60.000 empleos en los últimos meses, especialmente en inversión-, sino que es un imperativo de la transformación que ha escogido. Al final, si la idea de Botín es convertirse en un agente digital global, será necesario no solo estar integrado en torno a internet, sino también reducir su plantilla en unas proporciones nunca antes conocidas.
