Por qué la inteligencia artificial mejorará las relaciones entre empresas y empleados
Aunque a menudo se piensa que la inteligencia artificial destruirá puestos de trabajo, la realidad apunta a que podría mejorar la relación entre empresas y empleados, creando un nuevo entorno laboral más sano, amigable y eficiente. Pero ¿cómo lo hará?
La inteligencia artificial (IA) centra el debate de todo lo que tenga que ver con la tecnología, por sus enormes implicaciones en la generación de cambios disruptivos que veremos durante los próximos años. En el mundo laboral, la IA es vista como un posibilitador de negocios gracias a su impacto en la eficiencia de los trabajadores, al permitir eliminar tareas repetitivas y llegar a donde no siempre pueden llegar los humanos. Sin embargo, es esta capacidad la que también es vista por algunos expertos con temor, ya que piensan que podría destruir empleos precisamente por esa capacidad para automatizar sus tareas.
A pesar de todo ello, el último Índice sobre Relación con el Trabajo de HP revela un impacto de la inteligencia artificial en el mundo laboral con el que no se había contado hasta ahora. Se trata, ni más ni menos, que de una potencial capacidad para mejorar la relación entre empresas y empleados.
Cómo mejorar el entorno laboral con IA
A la mayor eficiencia que introducirá la IA en las tareas de cada empleado, algo que generalmente provocará que ese puesto de trabajo sea más atractivo y estimulante para cada profesional, se unen potenciales beneficios como una mayor capacidad de conciliación. Y es que es precisamente esa mayor eficiencia la que permitirá reducir la jornada laboral o apostar por modelos de trabajo híbridos o en remoto, dado que ni serán necesarias tantas horas en la oficina ni el hecho de tener que estar en la oficina. La automatización permitirá que los trabajadores se dediquen a tareas de mayor impacto y valor añadido, y la ‘externalización’ del resto de tareas a algoritmos permitirá que no sea necesario trabajar tantas horas.
La encuesta es reveladora: el 76% de los trabajadores cree que su trabajo será ‘más fácil’ gracias a la IA, y el 75% piensa que también será ‘más interesante’ (datos obtenidos en países de economías en crecimiento). Cifras que contrastan con la percepción actual, en entornos escasamente automatizados: solo el 20% de los trabajadores del conocimiento españoles cree tener una relación sana con su empleo (y empresa, por tanto).
El reto de integrar inteligencia artificial en el trabajo
A pesar de estos beneficios, la encuesta de HP también subraya una necesidad imperiosa: comunicar correctamente estos beneficios. Y es que la IA es vista de antemano como un posible ‘ladrón’ de empleos, por lo que a veces hay resistencias a la hora de integrarla. Es un proceso contrario a lo que sucedió con la implantación del teletrabajo, donde los empleados veían los beneficios que podría aportarles, pero las empresas temían que bajase la productividad. Nada de eso sucedió, como tampoco tiene por qué suceder ahora una pérdida masiva de empleos causada por la IA.
Según la encuesta, el 44% de los trabajadores de sectores del conocimiento españoles se sienten inseguros al utilizar la IA en el entorno laboral. Algunos piensan que están haciendo algo malo o que están descuidando sus obligaciones. El papel de las empresas es explicarles que la IA solo es una herramienta más para hacer mejor su trabajo, al igual que el salto entre la máquina de escribir y el ordenador permitió incrementar las capacidades de cada trabajador.
Este miedo está anclado en otro dato: el 41% piensa que está mal preparado para usar la IA en el entorno laboral. De nuevo, el papel de las empresas debe ser formar a sus plantillas para que puedan aprovechar una tecnología que ha llegado para quedarse y que redundará en beneficio de todos. De hecho, 7 de cada 10 líderes empresariales abogan por una formación adecuada en IA, lo que indica que comprenden la oportunidad que supone para sus organizaciones.
El reto es acercar posturas, dado que los líderes empresariales, a juzgar por los resultados de la encuesta, se muestran más entusiasmados con las posibilidades de la IA en el entorno laboral que los trabajadores. Reducir el miedo a lo desconocido a través del conocimiento, dotar de las herramientas adecuadas a los trabajadores y empoderarlos para que comprendan que la IA les ayudará en su trabajo (no que los sustituirá), son las claves para una integración suave y bien entendida. Si a ello se une una clara estrategia empresarial que tenga en cuenta las posibilidades para mejorar el entorno laboral a nivel humano gracias al poder de esta tecnología, el resultado solo puede ser uno: un nuevo éxito empresarial compartido y asentado sobre la mayor revolución digital de la historia.
