Las viñetas de Laura Santolaya (P8ladas) llevan años divirtiendo a los millenials en las redes sociales. Cada día más gente busca el amor a través de Internet, y ese es el tema de su primera novela gráfica.
Diremos que nos conocimos en un bar. El amor en la era del like (Lunwerg, 2019), refleja con humor esta realidad actual de las relaciones amorosas. España es el tercer país del mundo que más utiliza Internet para buscar una relación tras Estados Unidos y Brasil. Tinder, Happn, Meetic, eDarling, Adopta un tío… La oferta de aplicaciones para diferentes públicos ha cambiado la forma de relacionarnos y de buscar pareja. ¿Hemos perdido la paciencia? ¿nuestro estilo de vida nos lleva a menos lugares donde conocer gente? El hecho es que la mitad de las parejas que se forman ahora se conocen por Internet y más de doce millones de españoles han buscado su match alguna vez usando una aplicación.
La protagonista de Diremos que nos conocimos en un bar, declara en una viñeta que “la soledad se mide en las veces que te descargas Tinder”, y a lo largo del relato se enfrenta a situaciones que muchas personas solteras han soportado: la presión familiar y social por no tener pareja, la falta de planes porque sus amigos emparejados solo quedan entre ellos, dificultades para pagar un piso en solitario…
España es el tercer país del mundo que más utiliza Internet para buscar una relación, solo por detrás de Estados Unidos y Brasil
Poco después de irse a vivir sola, una vieja amiga la anima a instalarse una app para ligar, y una vez entra en esa especie de bar online del ligoteo, se va encontrando con perfiles que «tienen demasiado en común». Bromea sobre las típicas frases con las que se autodefine la gente en su perfil buscando más oportunidades de lograr un match: “estudió en la Universidad de la Vida, Facultad de la calle”, “repartidor de alegría, inventor de momentos”, y con el postureo generalizado que puebla el mundo digital.
Tras unos cuantos chats llega el momento de quedar, y aquí aparecen «esas personas que solo hablan de sí mismas o te someten a un interrogatorio soporífero, aquel del que ya lo sabes todo porque has buscado hasta la foto de su comunión en Facebook, quien viene a la primera cita casi con el anillo de boda, los que hablan de su ex… y, por supuesto, los que desaparecen (práctica conocida como ghosting)».
Diversión garantizada sobre un tema que, visto en plan trágico, pondría los pelos de punta…
Texto: J.C. de L.
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