Por qué las agendas personalizadas se abren paso en las empresas
Las agendas personalizadas se han convertido en uno de los regalos publicitarios más populares del momento, pero también en una forma de fidelizar a los propios empleados de una empresa. ¿Por qué esta fiebre por un producto en papel en plena vorágine del mundo digital?
Hay algunas razones que explican por qué personalizar la agenda empresarial se ha convertido en una costumbre recurrente tanto en ferias y congresos como dentro de la propia oficina. Una de ellas es la búsqueda de merchandising más sostenible y duradero. Frente al tradicional bolígrafo, una pieza que generalmente era de plástico y con una vida más que limitada, las agendas se convierten en obsequios de mayor calidad y vida útil.
En paralelo, la posibilidad de personalizar una agenda empresarial contribuye a crear imagen de marca. Y esto se nota más allá de los asistentes a una feria, hasta el punto de que se ha convertido en una nueva forma de fidelizar a los empleados.
¿SON LAS AGENDAS PERSONALIZADAS UN MÉTODO DE FIDELIZACIÓN?
Muchas empresas acostumbran a equipar a sus trabajadores con materiales de oficina. Bolígrafos, alfombrillas para el ratón o blocs de notas son un ‘obsequio’ habitual que busca dotar a la plantilla de herramientas para su trabajo diario. Pero detrás de esta provisión también hay estrategias de fidelización.
El hecho de que estos materiales suelan llevar impreso el nombre y logo de la empresa contribuye a que los empleados se sientan parte de un grupo y sean fidelizados. Y cuanto mejor es la herramienta, mayor posibilidad habrá de fidelizarlos. Aquí es donde entran en juego esas agendas personalizadas que permiten trabajar la imagen corporativa también dentro de la plantilla, en un momento en el que los trabajadores buscan cualquier potencial beneficio en la competencia para apostar por un cambio laboral.
LOS REGALOS PUBLICITARIOS PARA EMPRESAS TIENEN UNA DOBLE FUNCIÓN
Estos detalles demuestran que los regalos publicitarios para empresas tienen un componente estratégico que no debe despreciarse. Ahora, el merchandising forma parte de una estrategia de branding que trasciende a momentos puntuales como eventos o ferias y se instala en el interior de las empresas como parte de una estrategia de comunicación de puertas para adentro.
Lo positivo de estos productos es que son cada vez más asequibles y sostenibles, por lo que apostar por ellos se convierte en una buena opción a la hora de impulsar estrategias de creación y consolidación de marca. Por ello, el consejo que dan los expertos es que se apueste por estos objetos también dentro de la empresa, aunque también recomiendan apostar por aquellos de mayor valor añadido.
En relación con ello, recomiendan, en primer lugar, repartir esas agendas personalizadas con el logo de la empresa, así como combinar estos productos con bolígrafos de buena calidad y durabilidad, periféricos de informática (como pendrives o ratones de ordenador) y elementos para la organización del trabajo. Hay que buscar un equilibrio entre el detalle, la sostenibilidad y la utilidad, y quizás todo comience por personalizar agendas empresariales como punto de partida para una estrategia más amplia y duradera, dentro y fuera de la empresa.
