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Influencers que cambiaron el mundo: Nelson Mandela

Marketing| 5 de diciembre de 2018

El 5 de diciembre 2013 nos íbamos a dormir con la triste noticia de la muerte de unos de los grandes influencers de la historia. El expresidente de Sudáfrica, Nelson Mandela, fallecía a los 95 años en Johannesburgo (República de Sudáfrica) tras 6 meses luchando contra una infección pulmonar.

 

“Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, su procedencia o su religión. El odio se aprende; y, si la gente puede aprender a odiar, se le puede enseñar a amar, porque el amor es más natural para el corazón humano”.

Esta idea marcó la vida de Rolihlahla Mandela, conocido en el mundo como Nelson Mandela y en la República de Sudáfrica como Madiba, el nombre de su clan.

Este año se cumple un siglo de su nacimiento (18 de julio 1918) y nada hacía sospechar que aquel pastorcillo negro que jugaba con sus amigos al que un profesor puso el nombre inglés de Nelson llegaría a presidente de su país, se convertiría en un símbolo mundial de la libertad y su lucha no violenta por la igualdad, la justicia y la paz le valdría el Premio Nobel de la Paz en 1993.

Desde el final de la Primera Guerra Mundial, las exhaustas naciones europeas utilizaron África como una despensa donde reponer sus fuerzas, saqueando riquezas y expoliando territorios. Colonizada por Inglaterra desde el XIX, Sudáfrica tampoco logró sacudirse el yugo de los afrikáneres descendientes de sus colonos holandeses que, ante la creciente dejadez británica, lograron que se aprobaran en 1948 las leyes discriminatorias para la población negra que construyeron el apartheid.

En su larga encarcelación como consecuencia de su activismo (desde el 5 de agosto de 1962 hasta el 2 de febrero de 1990), Nelson Mandela se convirtió en un icono mundial inspirador de canciones como Free Nelson Mandela, de The Special AKA, y I Just Called to Say I Love You, de Stevie Wonder, que fue prohibida en la República.

He anhelado el ideal de una sociedad libre y democrática en la que todas las personas vivan juntas en armonía y con igualdad de oportunidades. Es un ideal por el que espero vivir y que espero lograr; pero, si es necesario, es un ideal por el que estoy dispuesto a morir», escribió desde la cárcel.

Al ser liberado en 1994 y ganar las elecciones por una amplia mayoría, no se convirtió en un endiosado autócrata, sino que trabajó por una nueva Constitución y nombró vicepresidente al afrikáner Frederik de Klerk, dando al mundo un ejemplo de reconciliación. “Para hacer las paces con un enemigo, trabaja con ese enemigo y ese enemigo se convertirá en un compañero”, manifestó.

El pasado 18 de julio, Barack Obama recordaba en Johannesburgo la necesidad de no bajar la guardia para mantener vigente el legado de Mandela: “Más de un cuarto de siglo después de que Madiba saliera de prisión, todavía he de decir en esta conferencia que la gente negra, y blanca, y asiática, y latinoamericana, y las mujeres, y los hombres, y los gais, y los heterosexuales, y todos nosotros somos humanos, que nuestras diferencias son superficiales y que debemos tratarnos los unos a los otros con cariño y respeto”.

 

Por Berta Lasso

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