Kate Middleton: los mejores ‘looks’ de la duquesa de Cambridge
Kate Middleton será reina. Sus buenos modales y su sonrisa sempiterna han fomentado que se posicione como la heredera del trono de Inglaterra más deseada, la sucesora perfecta de la reina Isabel II.
No importa que su nombre esté precedido por el título de duquesa de Cambridge o que, junto a su marido -el príncipe Guillermo-, se encuentre en la segunda posición de la línea sucesoria, tras el príncipe Carlos de Gales. El pueblo británico la adora y, por ello, es solo cuestión de tiempo que esa corona llegue a ella con ovación incluida.
Más allá de su carácter afable y de la afinidad que muestra en cada una de sus apariciones públicas, sus atuendos son completamente cautivadores. No hay estilismo donde no combine el último grito de moda con los patrones más férreos del estilo británico. Donde, por ejemplo, los tocados no pueden faltar. Un arte y una buena presencia que este domingo, 9 de enero, por el 40 cumpleaños de Kate Middleton, volverá a brillar.
ANÁLISIS DEL ESTILO DE KATE MIDDLETON
Al igual que otras royals -como la reina Letizia o el de las futuras herederas– a lo largo de estas décadas, su estilo se ha ido transformando, adoptando un rol más adulto y formal, pero manteniendo ese característico glamour. Es por ello que la firma de grandes diseñadores (como Alexander McQueen o Jenny Packham), las faldas de largo midi y sus, siempre eternos, looks monocromáticos siguen teniendo cabida en su vestidor. Preferencias y gustos propios donde, desde hace varios años, los guiños y los homenajes a la eterna Lady Di también han tenido su cabida.
Tal vez, por ese motivo, pese a las aparentes escasas innovaciones estilísticas de sus atuendos, sus looks no han cesado de ser aplaudidos. Un dato que ha suscitado que, para múltiples estilistas y expertos, sea una de las royals más aplaudidas en el terreno de la moda. En especial, con cinco de sus looks que, por la popularidad que alcanzaron, siguen siendo un referente estilístico puntuado con matrícula de honor.
SU IDILIO CON ALEXANDER MCQUEEN
Si hay un look que destaque, por encima de los demás, es su vestido de novia. Cuando en 2011 llegó a la Abadía de Westminster, un nuevo icono de la moda nació. El vestido, ideado y diseñado por Sarah Burton para la firma Alexander McQueen, afianzó la relación de la duquesa con la firma. Siendo, a día de hoy, una de sus prendas referentes de su armario.
El vestido que, según los deseos de la propia Kate, combinó tradición y tendencia. Dos corrientes aparentemente opuestas tejidas, a la perfección, en el corpiño de satén patronado por el estilo victoriano, marcado por un diseño de cintura estrecha.
La tradición converge en el tejido. Fue el satén en una tonalidad marfil, la tela elegida para confeccionar la cola del vestido de casi tres metros. La misma para el velo que, con múltiples bordados a mano, le aporta ese matiz vintage. Un aporte que solo se completa al ritmo de las joyas prestadas por la familia Middleton.
¿FUCSIA Y TOCADO? LA FÓRMULA ESTILÍSTICA DE SU ÉXITO
Para la boda de Eugenia de York con Jack Brooksbank, se decantó por este diseño de la firma Alexander McQueen con falda plisada y detalles abullonados. Una prenda que, como no podía ser de otra manera, combinó con un tocado con rejilla en el mismo tono, al igual que los zapatos forrados con una tela efecto mate.
Un estilo que combinaba y recopilaba sus básicos con ese guiño moderno, que Kate ya domina a la perfección.
UN ‘LOOK’ PUEDE LUCIRSE MÁS VECES CON EL MISMO ÉXITO
Todas tenemos ese look. Ese estilismo que potencia nuestras curvas con maestría y no cesa de cosechar aplausos, ¿cómo no repetirlo en más de una ocasión? Esa misma pregunta se debió hacer Kate Middleton cuando lució y repitió su impresionante vestido de lentejuelas verde botella diseñado por Jenny Packham. Una repetición marcada por dos años de diferencia, pero cómo olvidar ese majestuoso vestido.
La primera vez que lo lució fue en Pakistán, durante la visita oficial de los duques de Cambridge al país. Causó sensación e, incluso, revolucionó la tendencia cromática, convirtiendo el verde en el color de temporada.
La segunda vez fue hace unos meses, durante su cita en el Royal Albert Hall de Londres, donde prescindió de recogidos optando por unas glamurosas ondas de sirenas.
LENTEJUELAS Y MUCHO «BRILLI, BRILLI»
Si bien es cierto que los estilismos monocromáticos, marcados por las telas mates, protagonizan su vestidor; son las prendas opuestas las que más han conseguido levantar admiración y aplausos. Como se suele decir, rompe con los esquemas.
Recreando la tendencia de los años 20, Kate recurrió a un diseño de lo más atrevido de Jenny Packham marcado por líneas diagonales de lentejuelas doradas concentradas en el vientre. Un vestido que combinó con tacones dorados de Aquazurra, siguendo su regla de color. Una prenda que, bajo los hombros abullonados y la cintura más ceñida, acaparó todas las miradas durante la premiere de la nueva película de Bond, ‘No time to die’.
Curiosamente, el estilismo evocaba al que lució, durante una premiere de James Bond, Lady Di en el año 1985. Aunque, en lugar de una tonalidad dorada, la eterna princesa del pueblo optó por un tono plateado con el mismo brillo, pero diferente patrón de Bruce Oldfield.
SIMULANDO EL BÁSICO DE ARMARIO DE KATE MIDDLETON
Más allá de las faldas estilo midi o de los tocados, los abrigos largos de corte clásico predominan en su vestidor. Por ello, no es de extrañar que uno de sus últimos looks más aplaudidos fuera un cómputo entre ambas prendas.
La prenda en cuestión la lució hace unas semanas en la Abadía de Westminster, durante un concierto navideño al ritmo de populares villancicos. Fue entonces cuando Kate Middleton se decantó por un vestido rojo escarlata de Catherine Walker. Lo curioso del atuendo, más allá de los tacones de la firma Rossi, era el enorme lazo que sustituía cualquier escote. Un adorno que iba al unínoso de la fila perfecta de botones, que permitían una pequeña abertura central en el patrón.
