Mercadona da la espalda a la fruta española y se decanta por la sudafricana

No es la primera vez que Mercadona se enfrenta a críticas por la procedencia de su fruta. En un momento con una subida histórica de los precios en todos sus productos, y cuando los consumidores exigen que los alimentos sean locales, la cadena de supermercados valenciana se ha visto envuelta en una nueva polémica por la importación de sus cítricos.

A principios de este año, la cadena presidida por Juan Roig vivió una revolución en las redes cuando algunos usuarios la acusaron de vender tomates marroquíes como españoles. Los clientes le acusaban de vender en bandejas de tomates etiquetadas como «producto español» siendo en realidad, según ellos, alimentos marroquíes.

De hecho, la batalla contra los tomates marroquíes es algo que los agricultores llevan batallando desde hace años. De hecho, en 2021, COAG junto a la Fundación Mundubat sacaron a la luz la megalópolis que se está construyendo en el Sáhara Occidental. El principal problema de este entramado es que es imposible saber cuándo un tomate es de origen saharaui o marroquí, ya que no existe trazabilidad. Hay que recordar que no se pueden importar productos del Sáhara a Europa.

Este hecho vulnera el derecho del consumidor de conocer el origen del producto que después va a llegar a su hogar. Un derecho que está reconocido por la Unión Europea y que, sin embargo, a pesar de saberlo, no está haciendo nada para ponerle una solución.

Tanto el problema de los tomates marroquíes como el mal etiquetado de los productos no es algo nuevo para la industria. Sin embargo, este tipo de errores pueden afectar a la confianza de los consumidores en los productos y en la transparencia de la cadena de suministro.

Las naranjas de Mercadona proceden de Sudáfrica

Ahora las alarmas han saltado con las naranjas y mandarinas que se están vendido estos días en Mercadona. En esta ocasión, la chispa también ha saltado en las redes sociales. Los usuarios subían fotos de las etiquetas tanto de las naranjas como de las mandarinas donde ponía claramente que su origen era sudafricano.

Esto es algo que los usuarios han considerado inexplicable siendo una empresa valenciana, lugar con mayor presencia de estos frutos. Por este hecho, han exigido a Mercadona explicaciones de por qué ese menosprecio al producto local en favor de otro importado.

En esta ocasión, Mercadona sí que ha querido dar una explicación sobre este suceso. Según explica la compañía, «solo importamos naranjas desde mediados de agosto hasta el mes de noviembre aproximadamente, una vez hemos agotado el volumen de producción de la campaña nacional». Por lo que, según detallan, no se trata de una preferencia del producto sudafricano frente al valenciano, sino que la importación es la única manera de tener estas frutas en esta época del año.

Además, añaden que «cuando empieza la campaña española en noviembre y hasta el mes de agosto aproximadamente, tenemos naranjas 100% nacional procedente de diferentes Comunidades Autónomas».

Es cierto que la estacionalidad de estas frutas hace complicado que siempre puedan estar en los lineales. Es por eso que se siembra la duda de si realmente es necesario que haya naranjas todo el año en los lineales de supermercado o solo debemos comer las frutas de cada época del año.

El tiempo marcará la campaña de fruta cítrica de Mercadona

Lo cierto es que desde noviembre de 2022 hasta agosto de 2023, es decir, la última campaña cítrica de Mercadona, la compañía valenciana adquirió más de 200.000 toneladas de estos frutos. De esta cantidad, 140.000 correspondieron a naranjas, 56.000 toneladas de mandarinas y 17.000 de limones. Con estos datos en la mano no se puede decir que la cadena de supermercados no apueste por los productos españoles.

De cara a este año, Mercadona prevé comenzar con su nueva campaña en estas primeras semanas de octubre, empezando por las mandarinas y los limones, para ir incorporando poco después el resto de cítricos. En concreto, la empresa compra a agricultores de la Comunidad Valenciana, Andalucía, Región de Murcia, Cataluña y Canarias estos alimentos.

Sin embargo, como ocurre con el resto de productos del campo, Mercadona también mira al cielo para hacer sus cálculos. De hecho, «según las perspectivas climáticas actuales», no creen que puedan contar con naranjas españolas en sus lineales hasta principios de noviembre.

Por el momento, el Ministerio de Agricultura vaticina que la cosecha española de cítricos de la temporada 2023/24 alcanzará los 5.754 millones de toneladas de cítricos gracias a la abundancia de limones. Sin embargo, la producción de naranjas se espera un 8,2% más bajas, cayendo de las 2.878.122 toneladas a las 2.643.299.

Si la comparación conjunta de las cosechas citrícolas de un año a otro apenas da una variación del 0,4%, mucho más significativa es la evolución de tonelajes en plazos más largos: un 14,4% por debajo de la media de los últimos cinco años, la segunda cosecha más baja de las últimas once temporadas y la producción naranjera más pequeña en más de una década.

Lo que sí que ha querido subrayar la compañía es que «el compromiso de Mercadona con el sector primario es firme y prioriza garantizar relaciones estables y transparentes con sus más de 25 proveedores nacionales, quienes a su vez trabajan con más de 2.500 agricultores de toda España».

Hasta la fecha, el 85% de las naranjas que se vendían en Mercadona eran de origen nacional. Con la crisis climática actual, y viendo que el campo se ha puesto en pie de guerra para reclamar un dinero justo por sus cultivos, habrá que ver cómo se soluciona este problema.