Influencers que cambiaron el mundo: Louis Braille

Se cumplen 215 años del nacimiento de Louis Braille, el pedagogo francés que cambió para siempre el mundo de la discapacidad visual.

Louis Braille nació en el seno de una familia humilde dedicada a la talabartería en Coupvray, un pequeño pueblo a las afueras de París. Un día, tratando de imitar a su padre, el pequeño Braille se hirió en un ojo, lo que al cabo de poco tiempo le afectaría al otro, provocándole finalmente una ceguera irreversible a los 5 años de edad. Sus padres, sin embargo, no dejaron de educarle como a sus otros hermanos, enseñándole a leer incluso, formando letras con tachas de tapicero sobre cuero y madera, para después llevarle a la escuela como cualquier otro niño de su edad.

Allí, en el colegio, demostró unas actitudes de aprendizaje, observación, curiosidad y resiliencia tales que obtuvo una beca para ingresar en el Instituto Nacional para Jóvenes Ciegos de París en 1819. Su temprana ceguera afectó a su gestualidad, pero no le impidió tener el carácter cálido y afable con el que más adelante granjearía grandes amistades en el instituto.

Por aquel entonces, el tratamiento a las personas con discapacidad visual era deleznable. Desprecio, burla y una total falta de comprensión eran habituales hacia un colectivo relegado a la pobreza de pedir limosna por las calles y residir en hospicios que no reunían las condiciones de salubridad. Y, por ello, a lo largo de la historia, se han eclipsado grandes personalidades invidentes que lograron avanzar en los campos de la ciencia, la medicina y las artes, para perjuicio de su valía.

Sin embargo, con la caída del Antiguo Régimen, Francia, y Europa por extensión, comenzaron a promover una serie de cambios encaminados a proveer de derechos básicos y educación a los grupos marginados de la sociedad.

Ya en 1784, el intelectual Valentin Haüy —fundador de lo que más tarde sería el Instituto Nacional para Jóvenes Ciegos— había conocido el caso de una pianista invidente, Maria Theresia von Paradis, que había aprendido las notas de su instrumento palpando alfileres clavados en almohadones a modo de notas musicales.

Esto inspiró a Haüy a crear el sistema que posteriormente mejoraría con brillantez Louis Braille. El método consistía en formar letras con relieve. Un sistema que, si bien había demostrado éxito para la lectura, resultaba más difícil de seguir en la escritura, por lo que Braille patentó, inspirado a su vez por otro método militar, su código homónimo en 1829, un sistema que fue simplificándose hasta conseguir el beneplácito universal de todo el colectivo, no sin antes enfrentar prohibiciones de uso al ser tachado de segregativo cuando fueron los propios invidentes quienes lo impulsaron, incluso clandestinamente, frente a un colectivo de profesores videntes reacios a tener que aprender un nuevo sistema. Pero esto no frenaría su difusión mundial.

Finalmente, habiendo alcanzado el puesto de profesor en la institución, Braille no pudo vivir lo suficiente para ver cómo su invento se implantaba por todo el planeta, dando voz y vista a quienes fueron privados de ella. Murió de tuberculosis en 1852, enfermedad contra la que luchó durante gran parte de su vida por las malas condiciones que enfrentó al comienzo en el instituto. Un final desesperanzador para un genio de la esperanza.

Ilustración: © The Granger Collection, New York